La huella de carbono es un problema que, con el paso del tiempo, está produciendo importantes estragos en la Tierra. El calentamiento global se ha acelerado en el último siglo como consecuencia de la actividad del ser humano. En esta nueva situación, es fundamental encontrar la fórmula para atrapar parte del dióxido de carbono que se emite cada día. Ahora, unos investigadores han podido comprobar cómo un nuevo material puede servir para encapsular una buena parte de estas emisiones. ¿En qué consiste esta solución y hasta qué punto puede ser revolucionaria?
El nuevo material que puede reducir la huella de carbono de forma exponencial
La Universidad Heriot-Watt de Escocia ha logrado capturar dióxido de carbono y hexafluoruro de azufre a una velocidad notablemente superior a la que lo puede hacer el árbol promedio. De acuerdo con la publicación del estudio en Nature, nos encontramos ante una investigación que también ha implicado a otros centros especializados en la búsqueda de alternativas para mejorar la calidad del aire. Este nuevo material es el resultado de mezclar cantidades de oxígeno, nitrógeno y flúor con el objetivo de atrapar una mayor cantidad de los compuestos mencionados anteriormente.
Reducir la contaminación es algo necesario en el momento en el que vivimos. Apostar por las ventajas que ofrece el coche eléctrico es un campo por explotar que puede resultar imprescindible, pero no es el único movimiento que debe hacerse. Para la creación de este nuevo material poroso se ha requerido la constitución de programas basados en inteligencia artificial. La combinación proporcionada se ha visto como una alternativa viable. Ahora, el próximo paso es fomentar su producción a gran escala con el objetivo de que pueda integrarse en puntos estratégicos en las ciudades.
Este es un descubrimiento emocionante porque necesitamos nuevos materiales porosos para ayudar a resolver los mayores desafíos de la sociedad. Marc Little, investigador de la Universidad Heriot-Watt
Este movimiento que tiene como objetivo la captura de carbono se denomina jaula de jaulas, ya que el objetivo es encapsular las partículas de dióxido de carbono y hexafluoruro de azufre, elementos que contribuyen notablemente al conocido como efecto invernadero. Y bien, ¿por qué este tipo de investigaciones y tecnología puede resultar diferencial? El método más eficiente para retener estas emisiones es mediante la plantación de árboles, pero lo cierto es que el rédito que se obtiene llega pasados unos cuantos años desde la puesta de la semilla en la tierra.
Habrá que esperar un tiempo para comprobar si es posible lograr una escalabilidad de esta tecnología o si, por el contrario, hay que seguir investigando acerca de nuevos materiales porosos. Sea como fuere, el objetivo está claro en lo que se refiere a las diferentes formas de actuar frente a la gravedad de la huella de carbono generada por el ser humano.
El artículo La huella de carbono podría reducirse con este nuevo material, todo depende del uso que le demos fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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