Los 11 motores de gasolina más fiables

Hay varios tipos diferentes de compradores de coches. Si nos quedamos con el mercado actual, podríamos diferenciar fácilmente un par de grupos muy claros: las personas que contratan vehículos de renting, y los que se deciden directamente por la compra. A pesar de que estos perfiles pueden ser muy distintos, ninguno de ellos querría tener en su garaje un coche con una fiabilidad baja. Al fin y al cabo, todas las ventajas de tener coche se disipan en el momento en el que la máquina nos deja tirados en el arcén.

La publicidad es una herramienta muy poderosa. Tanto, que muchos consumidores acaban comprándose un coche poco fiable, atraídos por otros temas que deberían ser secundarios, como lo son el diseño, el confort interior o la propia marca del vehículo.

Por suerte, el mercado actual está abarrotado de coches que tienen mecánicas muy fiables. Si estás buscando un coche de gasolina y no te apetece nada tener que invertir dinero a largo plazo en mantenimientos extra y reparaciones, ve a por papel y lápiz, porque estos son algunos de los motores más fiables que se comercializan en la actualidad en coches nuevos.

Toyota 2.5 (A25A-FKS)Mazda SkyActiv-GToyota 1.0 VVTiStellantis Pentastar 3.6 V6Honda 1.5 VTEC TurboSubaru 2.5iFord EcoBoostRenault 1.3 tCeToyota 1.5 (M15A-FXE)Hyundai-Kia T-GDiGeneral Motors 6.2 V8

Toyota 2.5 (A25A-FKS)

Este 2.5 de Toyota está diseñado milimétricamente para trabajar con el mínimo estrés posible

No van a ser pocos los propulsores japoneses que van a salir en esta lista. Si una marca tan fiable como Toyota fabrica un motor con una cilindrada generosa y además, es atmosférico, tenemos la combinación de libro de lo que es un propulsor fiable.

El 2.5 de gasolina es un bloque que el fabricante usa en un montón de vehículos. En Toyota se monta en el Camry y en el RAV4, mientras que en Lexus podrás verlo bajo el capó del ES y el NX, entre muchos otros.

Pese a ser un motor repleto de electrónica y sensores, este propulsor ha demostrado ser todo un estandarte de la fiabilidad desde que salió a la venta en el año 2017. El motor tiene una potencia de entre 177 y 205 CV —un poco menos en la variante que se monta en coches híbridos, que se nombra con otro código—, y tiene un consumo realmente bajo, que es el motivo por el que los ingenieros nipones se decantaron por diseñar un bloque grande, pero de cuatro cilindros en línea.

Mazda SkyActiv-G

La industria japonesa del automóvil se caracteriza por ir a su propio ritmo. Son muy de experimentar y, en ocasiones, los avances que hacen son incomprendidos a nivel mundial. Esta es, sin duda, la fórmula que tienen de adelantarse a los acontecimientos.

La historia de Mazda nos deja ver que, dentro de las marcas japonesas, ellos son los más japoneses. Se quedaron solos con el motor rotativo —y siguen experimentando con él—, y también son los únicos que se han negado a miniaturizar sus motores de gasolina. El resultado es una fórmula que da motores no muy potentes, pero fiables y con unos consumos ridículos.

La familia SkyActiv-G de Mazda, en especial, el 2.0, utiliza su cilindrada para generar una relación de compresión alta. Esto, sumado a la distribución inteligente de las válvulas y a un sistema de inyección muy preciso, da como resultado un motor que consume poco, contamina poco y no pone en jaque su fiabilidad.

Las versiones actuales de este propulsor desarrollan entre 122 y 150 CV en vehículos como el Mazda 3. Gracias a la hibridación ligera, estos coches también pueden lucir la pegatina ECO.

Toyota 1.0 VVTi

El Aygo Cross es mucho más caro que sus competidores, pero merece la pena por su calidad

Vendido con numerosos nombres comerciales, estamos ante el motor que han montado históricamente coches como el Toyota Aygo, el Citroën C1 o los Peugeot 107 y 108. Este bloque se sigue instalando en vehículos como el Toyota Aygo X en la actualidad. No destaca por su potencia, pero sí por su por ser bastante duro.

El secreto de este motor es su simplicidad. Los ingenieros que desarrollaron el propulsor se aseguraron de dejarlo bien atado. Es un bloque atmosférico con la potencia justa para un city car, la sincronización se realiza por cadena y, en general, tiene un diseño muy básico.

Toyota sabe que el margen de beneficio que dejan los coches de ciudad es muy pequeño. Por eso, fabricar un propulsor muy fiable y fácil de mantener es clave para no tener que tramitar garantías y perder ese margen. El grupo francés PSA también vio esa ventaja en su día, por lo que se unieron a los japoneses para compartir costes a cambio de esta ventaja.

Stellantis Pentastar 3.6 V6

Aunque solemos hablar solo de la parte más europea del conglomerado Stellantis, lo cierto es que al otro lado del charco, este fabricante tiene un gran mercado con Jeep, Dodge, Chrysler y RAM. Bajo estos emblemas se comercializa el motor Pentastar 3.6 V6 desde el año 2010. Hace años se especuló con la idea de que podría desaparecer. Sin embargo, en la actualidad se monta en coches como el Jeep Wrangler o la RAM 1500 más básica.

El Pentastar es un motor de alto rendimiento que está muy bien equilibrado. Ha recibido varios galardones por su diseño y funciona realmente bien en prácticamente todos los vehículos en los que se ha instalado. A pesar de ser un propulsor diseñado para hacer trabajo pesado, ya sea en vehículos tipo pickup o en todoterrenos, lo cierto es que tiene un consumo bastante reducido si se le compara con otros motores de la competencia. Esto se debe a su buena construcción, sumada a un sistema de distribución variable que ha hecho que los coches que montan el Pentastar tengan una gran reputación. Ojalá que siga a la venta durante muchos años más.

Honda 1.5 VTEC Turbo

La gran reputación del Civic se debe a los buenos motores que ha montado históricamente

Hemos dicho antes que los japoneses hacen las cosas de forma diferente. Pues bien, cuando deciden seguir la corriente al resto de fabricantes, también son capaces de hacer motores que sobresalen de la media.

No son pocos los fabricantes que han optado en los últimos años por fabricar un motor gasolina de cuatro cilindros en línea con una motorización 1.5 turbo. Sin embargo, la propuesta de Honda es la mejor del mercado con diferencia. Va equipado en varios de los automóviles que tiene en cartera la marca nipona, destacando el Honda Civic.

A pesar de la incursión en el terreno de la miniaturización, este bloque de Honda que lleva ya unos cuantos años entre nosotros, ha demostrado ser bastante más fiable que otras alternativas. Tiene una respuesta muy directa, especialmente en las versiones más potentes, que se sienten como si lleváramos un coche atmosférico de más cilindrada. Es capaz de empujar muy bien en todo el rango de revoluciones, y tampoco llega a volverse inestable cuando el tacómetro está en la parte más baja.

Llegados a este punto, habrás pensado que es imposible dar fiabilidad y rendimiento junto a unos buenos consumos. En este aspecto, este pequeño motor de Honda también se lleva otra matrícula de honor. Su consumo está por debajo de otros propulsores equivalentes, incluso cuando se monta en automóviles que no tienen parte híbrida.

Subaru 2.5i

No sabemos cuánto tiempo más mantendrá Subaru su motor 2.5, pues la marca está empezando a utilizar su 2.0 turbo en la mayoría de modelos. En cualquier caso, el 2.5i es un bloque que podemos encontrar todavía en el Subaru Outback. Se trata de un motor bóxer de 2.5 litros atmosférico, con todos los beneficios que esta configuración puede aportar a un vehículo con tracción a las cuatro ruedas.

Podríamos hacer una larga lista de motivos por el que este motor nos parece interesante, aunque el principal es el de la fiabilidad. Estamos ante un bloque muy sólido, algo que no debería extrañarnos demasiado, pues la marca japonesa ha perfeccionado su diseño durante 30 años. Tanto, que incluso se puede repostar con GLP. Si no sabes muy bien de qué carburante hablamos, echa un vistazo a esta entrada sobre los tipos de combustibles que existen para coches.

Sí que es cierto que su potencia está muy medida, desarrollando unos 182 CV en el Outback, lo que significa que el fabricante no quiere forzar la mecánica y comprometer su fiabilidad. En cuanto al consumo, es correcto, pero no es la octava maravilla, siendo una pequeña desventaja frente a otros motores más modernos.

Ford EcoBoost

En su terreno, Ford no tiene un solo rival que se le acerque

¿Se puede hacer downsizing sin comprometer la fiabilidad? Los años de ventaja de Ford en este terreno han hecho que, históricamente, sus motores de pequeño tamaño sean muy superiores a los de sus competidores. Y esto no lo decimos nosotros, sino a los 11 premios ‘International Engine Powertrain of the Year’ que se ha llevado la marca del óvalo con estos motores desde el año 2010.

Los motores EcoBoost de Ford han pasado por diferentes etapas. En cada una de ellas han mejorado a nivel de prestaciones, reduciendo consumos y emisiones. De hecho, incluso fueron capaces de implementar la tecnología de desconexión de cilindros en sus bloques, algo que parecía en su día brujería si tenemos en cuenta que se aplica a bloques tricilíndricos de un litro.

En el momento actual, estamos ante unos motores muy sólidos y con un histórico de fiabilidad muy amplio. La hibridación también ha puesto de manifiesto la ventaja de Ford en este sentido, pues con esta tecnología eléctrica, la marca puede reducir aún más sus consumos. Si nos vamos al catálogo, puedes ver estos propulsores en automóviles como el Puma, el EcoSport o el Focus.

Renault 1.3 tCe

Sin perder el hilo de los motores con downsizing que merecen la pena, tenemos el 1.3 turbo de cuatro cilindros en línea de Renault. Está disponible en las versiones microhíbridas del Captur y el Arkana, así como en vehículos de Nissan y Mercedes-Benz.

Este propulsor se diseñó en su día tratando de resolver los pequeños problemas de su predecesor. Se fabrica aquí en España desde el año 2017, y no te va a dar quebraderos de cabeza si haces los mantenimientos que establece el fabricante.

Este motor también está en constante evolución, por lo que también hemos podido ver cómo Renault ha ido sacando versiones más potentes y con menos consumo sin poner en riesgo su fiabilidad.

Toyota 1.5 (M15A-FXE)

El Yaris y el Yaris Cross comparten este mismo propulsor 1.5 de gasolina

Regresamos a Toyota con otro de los motores con los que difícilmente te puedes equivocar. El 1.5 gasolina que llevan modelos como el Yaris híbrido es otro bloque hecho para durar, gracias a un pequeño secreto que se guardan los japoneses bajo la manga.

Toyota no sobrealimenta este bloque de 1.5 litros con turbo ni nada parecido. De hecho, si tomamos como ejemplo el Yaris de 130 CV, podremos ver en su ficha técnica que este motor térmico solo aporta 92 CV al total. ¿Qué significa esto? Pues, que Toyota usa un motor atmosférico bastante grande para que trabaje sin ningún tipo de estrés y compensa la potencia con la parte eléctrica. El resultado de este mix es un vehículo con una fiabilidad sobresaliente y que consigue homologar unos consumos que serían impensables hace un par de décadas.

Hyundai-Kia T-GDi

Además de tener buena relación calidad-precio, el Hyundai Tucson también lleva un motor muy fiable

Hyundai y Kia también tienen en su catálogo algunos vehículos con motores muy miniaturizados. Sin embargo, para los modelos que requieren más potencia, estas dos marcas utilizan sus motores T-GDi. Están compuestos por un bloque de cuatro cilindros en línea con turbocompresor. Actualmente, en el catálogo solo veremos el bloque de 1.6 litros, que ha venido a sustituir al 2.0 T-GDi de hace unos pocos años, que tenía incluso una mejor reputación.

El consumo de estos motores no es algo especialmente reseñable. Son adecuados, especialmente cuando se equipan en automóviles con carrocería SUV, menos aerodinámicos y con tendencia a consumir un poco más. Por norma general, esta familia de motores coreanos tiene buenas prestaciones y rara vez vas a escuchar cosas negativas de ellos.

El rango de potencias de estos 1.6 varía en función del tipo de vehículo que compres y de si eliges las versiones con tracción frontal o a las cuatro ruedas. Cuando va en automóviles con hibridación convencional, desarrolla unos 230 CV. En el caso de los híbridos enchufables, la cifra combinada junto a la parte eléctrica aumenta hasta los 265 CV en automóviles como el Kia Sorento.

General Motors 6.2 V8

Encontrar un vehículo que circule por Europa con este propulsor puede resultar un tanto difícil. En cualquier caso, General Motors lleva décadas puliendo este propulsor V8 que montan deportivos como el Corvette y vehículos de trabajo como la Silverado.

Este motor 6.2 V8 tiene una gran reputación en América y Australia, que son los mercados en los que más se han comercializado vehículos con esta mecánica. Están fabricados para durar, por lo que aguantan muy bien el paso del tiempo, especialmente en el caso de las pickups, que son vehículos que van a trabajar en condiciones más exigentes.

Otra de las grandes bazas de este motor es que tiene distintas variantes en función del uso que se vaya a dar a la máquina. La mayoría de ellos son atmosféricos, pero también se comercializan en versiones LT4 y LT5, con supercargador para tener un extra de potencia. En cuanto a los consumos, como era de esperar en motores de estas prestaciones, son altos, aunque tampoco alarmantes.

Como decíamos al principio, existe actualmente una gran oferta de coches con motores gasolina de gran fiabilidad. Si quieres seguir leyendo sobre coches fiables, echa un ojo a esta entrada sobre los motores diésel de segunda mano más fiables del mercado. Si el gasóleo nunca te ha hecho tilín, puede que tu opinión cambie un poco después de leer nuestra guía sobre consumo y rentabilidad de diesel y gasolina.

El artículo Los 11 motores de gasolina más fiables fue publicado originalmente en Urban Tecno.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*