Este es el iPhone más extraño que existe: no tiene cámaras, y esta es la razón de ello

Apple es uno de esos fabricantes del mercado del smartphone que renueva sus dispositivos cada año agregando importantes innovaciones en el módulo de cámara. Además, es preciso indicar que la cámara trasera ya no solo es importante para realizar instantáneas o grabaciones de vídeo, sino que es un elemento esencial para la obtención de información a través de los códigos QR. Entonces, ¿por qué hay algunos iPhone que no cuentan con esta tecnología?

La seguridad es el factor clave que les hace perder el módulo de cámara

Apple es consciente de que las lentes de la cámara es una de las áreas que puede ser objeto de acceso para ciberdelincuentes. Pese a que los diversos sistemas operativos de la firma de la manzana son los más seguros en lo que se refiere a seguridad y privacidad, la eliminación de este componente puede ser un paso más para evitar cualquier filtración. En este sentido, hay empresas que se encargan, precisamente, de eliminar esta tecnología para limitar, todavía más, el acceso a un tercero.

La eliminación de las cámaras permite evitar cualquier posible hackeo. Noncam

El debate surgió a través de un hilo de Reddit en el que la gente se preguntaba cómo era posible que alguien quisiese los dispositivos más avanzados de Apple sin el correspondiente módulo de cámara. Desde entonces, se ha podido conocer cuál es el verdadero motivo para querer una unidad así. Lo cierto es que no falta demanda, ya que altos cargos de empresas estratégicas o personas involucradas en la política son algunos de los principales perfiles que encargarán una modificación personalizada de su iPhone.

Las conversiones pueden ser estándar o personalizadas, pudiendo eliminar otros canales de acceso al terminal, tales como el micrófono. Se trata de trabajos que llevan realizándose desde comienzos de la década pasada, momento en el que la cultura del smartphone vivió su particular crecimiento. Desde entonces, se ha podido comprobar cómo esta industria ha experimentado un fuerte incremento en el número de servicios debido al increíble software de Apple.

Los precios de estos trabajos pueden ser disparatados. Por ejemplo, un iPhone 6s nuevo puede costar 1.043 dólares, mientras que un iPhone SE de 2020 puede superar el precio de los 1.391 dólares. Es lo que tiene la realización de un trabajo exquisito y centrado en la seguridad. Si, por el contrario, se quiere disfrutar de un kit de conversión para realizar uno mismo el trabajo guiado, se puede obtener previo pago de 250 dólares.

Nos encontramos ante una tecnología que puede perder glamour con esta cámara de tres lentes que caracteriza a los modelos Pro, pero aun así, nos encontramos ante una solución muy válida para aquellos que quieren disfrutar de iOS sin tener prácticamente canales de acceso a nuestro dispositivo. Y tú, ¿comprarías un móvil de estas características?

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