Pocos inventos han cambiado tanto la producción agrícola como el tractor. Estos vehículos que tienen su origen a principios del siglo XX han conseguido mejorar las condiciones de trabajo en el campo, permitiendo llevar a cabo tareas de lo más diversas con un esfuerzo menor. Se podría decir que los tractores son el mejor socio de los agricultores para llevar a cabo las tareas de la labranza, romper la tierra, romper los restos de cultivos anteriores, eliminar las malas hierbas o cubrir las semillas, entre otras muchas cosas. Trabajos que antiguamente se hacían a pie o con el apoyo de caballos y/o bueyes.
Desde que el uso de los tractores se ‘democratizó’ durante la década de 1920, algunas marcas se han convertido en referencia del sector. John Deree es quizá el fabricante de tractores y maquinaria agrícola más conocido con su característico logo amarillo en forma de ciervo, pero otras marcas tienen un gran peso y tradición en la producción de tractores como New Holland, Fendt o MeriCrusher. Sin embargo, el sector también ha dado espacio a marcas de automóviles que en algún momento de su historia han fabricado tractores, al igual que ahora se hacen hueco otro tipo de marcas con sus nuevos tractores eléctricos.
El Lamborghini 660-F fue uno tractor muy apreciado entre los agricultores, sobre todo en Italia
Aunque es algo más o menos conocido, Lamborghini comenzó fabricando tractores antes de ser una de las marcas de referencia en el segmento de los superdeportivos. La culpa es de Ferruccio Lamborghini, fundador de la marca. Durante sus años de adolescencia trabajó en la granja de sus padres, por lo que tras la II Guerra Mundial fundó Lamborghini Trattori, firma que construía potentes tractores -en los que ya aparecía su famoso logo– que adquirieron gran fama entre los agricultores italianos. El éxito de los tractores de Lambroghini fue base para que Ferruccio viera otras opciones y al final apostase por los automóviles deportivos. Todavía hay tractores Lamborghini en funcionamiento.
Otra marca asociada al segmento de los deportivos que también ha construido sus propios tractores es Porsche. Durante un breve periodo de tiempo que se extendió entre mediados de la década de 1950 y principios de la siguiente década, gran parte del negocio de Porsche se centró en los tractores. En un contexto complicado tras la II Guerra Mundial y la posterior muerte en 1951 de Ferdinand Porsche, la firma de Stuttgart encontró en la producción de motores Diésel para tractores una válvula de escape que junto al Porsche 356 permitieron a la marca recuperarse de esta difícil situación y ser el gran fabricante de coches que es hoy en día.
La producción de tractores salvó a Porsche de una situación muy delicada en la década de 1950
De vuelta a Italia, otro fabricante con raíces en el mundo agrícola es FIAT. Casi dos décadas después del lanzamiento de sus primeros vehículos, la marca se adentró en la producción de tractores, siendo el primer exponente de esta línea de negocio el FIAT Trattori. Quizá el FIAT 18 de 1957 ha sido el tractor de la marca con más aceptación dentro de una larga historia que todavía a día de hoy se mantiene viva. Aunque FIAT ya no fabrica tractores bajo su marca, en 1991 compró la compañía New Holland, por lo que aún mantiene cierto contacto con el sector.
No podía faltar en este repaso Ford, con la gran expansión de la maquinaria agrícola que se vivió en Estados Unidos en la época en la que Henry Ford desarrollaba los primeros automóviles de la marca. Una década más tarde del lanzamiento del Ford T, en 1920, Henry y su hijo Edsel produjeron el primer tractor agrícola de la marca. La línea de negocio estuvo enfocada en desarrollar un producto popular que aliviara la carga de los agricultores de todo el país. Aunque Ford no fabrica tractores desde 1990, lo cierto es que su papel en el sector agrícola ha sido destacado.
El artículo Nada de John Deere: 4 marcas de coches que en su día fabricaron tractores fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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