Cuánto combustible consume el aire acondicionado del coche

El aire acondicionado es uno de los elementos indispensables de cualquier vehículo, sobre todo ahora que el verano está en pleno apogeo. Aunque los sistemas de climatización de los coches han evolucionado de manera notable en las dos últimas décadas, aún hay muchos conductores que se preocupan por el consumo adicional de combustible que puede genera el uso del aire acondicionado. Por eso, en este artículo vamos a intentar arrojar luz sobre el consumo real de combustible que puede tener el aire acondicionado en un vehículo.

Aunque como es lógico esto depende de muchos factores, lo que sí hay que tener muy claro es que tanto si tu vehículo es antiguo como si es muy moderno y cuenta con climatizador por zonas, el funcionamiento básico del aire acondicionado es el mismo en todos los coches y se sustenta principalmente en tomar aire caliente, enfriarlo e introducirlo en el habitáculo del mismo, proceso que requiere un consumo de energía que deriva en un mayor consumo de combustible que si circulamos en condiciones estándar sin tener el aire acondicionado encendido.

El concepto básico del aire acondicionado del cochePartes del aire acondicionado del vehículoConsumo del aire acondicionado del cocheEfecto del aire acondicionado en la potenciaAire acondicionado vs. ventanillas bajadasCómo reducir el consumo del aire acondicionado

El concepto básico del aire acondicionado del coche

El aire acondicionado de un vehículo no es distinto al que podemos tener en nuestras casas, por lo que su funcionamiento se basa en la circulación de un gas refrigerante dentro de un circuito cerrado por distintos componentes mecánicos, provocando cambios de estado en este gas que permiten enfriar el aire caliente del exterior del coche o del interior del habitáculo si optamos por el modo de recirculación. Cuando este aire ya frío es impulsado hacia las salidas del climatizador por el ventilador, se filtra y deshumidifica, mientras el gas refrigerante inicia de nuevo el circuito.

Por ende, para un correcto funcionamiento del aire acondicionado hay que revisar el correcto funcionamiento de sus distintos componentes y la estanqueidad del circuito de refrigeración. Si existe una fuga de líquido refrigerante o alguno de los componentes del sistema no funciona de forma correcta nos podemos encontrar con un escenario en el que al encender el climatizador, el aire acondicionado no enfría, lo que sin duda es una auténtica tragedia cuando en verano aprieta el calor.

El funcionamiento del aire acondicionado es muy parecido en todos los vehículos, independientemente del sistema de climatización que tengan

Partes del aire acondicionado del vehículo

En líneas generales, todo aire acondicionado de un vehículo cuenta a nivel interno con cuatro componentes que hacen que el sistema funcione correctamente. El elemento principal es el compresor, encargado de aspirar el gas refrigerante y comprimirlo al someterlo a presión con un mecanismo que funciona gracias a su conexión al motor del coche. El compresor logra subir la temperatura del gas que al pasar por el condensador pasa a estado líquido, cediendo el calor al aire exterior al estar más caliente este líquido que el aire con el que está en contacto el condensador.

Este líquido resultante al llegar a la válvula de expansión se descomprime y al cambiar a estado gaseoso se enfría aún más. El gas frío resultante pasa por el evaporador, logrando enfriar el aire que está en torno a este componente y que es impulsado por el ventilador hacia el habitáculo a través de las toberas de salida del climatizador. El gas de nuevo caliente tras su paso por el evaporador comienza de nuevo el ciclo dentro del circuito cerrado al llegar al compresor para ser de nuevo comprimido.

Consumo del aire acondicionado del coche

Es difícil establecer un consumo de combustible exacto derivado del uso del sistema de aire acondicionado, sobre todo porque depende del vehículo, de la eficiencia del mismo y de la exigencia a la que sometamos al aire acondicionado por factores como la temperatura interior y exterior o la temperatura que queramos alcanzar. Con todo, en términos generales se da por bueno que el consumo de combustible de un vehículo con el aire acondicionado encendido aumenta de un 5 a un 20%, siendo una media aceptada un consumo un 10% superior al que se tendría sin el aire acondicionado puesto.

¿Y esto cuánto es? En un coche con un consumo de 5 litros a los 100 kilómetros en condiciones estándar, el uso del aire acondicionado de manera continuada se traduce de manera aproximada en un consumo adicional de 0,5 litros por cada 100 kilómetros. Eso sí, hay que tener en cuenta que es extraño que el aire acondicionado funcione de manera permanente ya que el compresor se suele desacoplar cuando se ha alcanzado la temperatura deseada y se vuelve a acoplar cuando el habitáculo vuelve a ganar temperatura. Por eso, el consumo de un sistema de aire acondicionado eficiente puede ser de unos 0,2 o 0,3 litros por cada 100 kilómetros.

Los sistemas modernos de climatización pueden ofrecer temperaturas diferentes en distintas zonas del vehículo

Efecto del aire acondicionado en la potencia

Dejando por un momento el consumo de combustible, el aire acondicionado también tiene una cierta incidencia en la entrega de potencia del vehículo. Cuando el aire está encendido, se produce una disminución de la potencia disponible. Se estima que, según vehículo, la pérdida de potencia por llevar el aire acondicionado es de entre 2 y 15 CV, siendo más notoria cuando el propulsor es más pequeño e inapreciable en propulsores que superan los 110 CV. En este sentido, la pérdida de potencia se hace sobre todo palpable cuando el vehículo está subiendo un repecho y circulando en una marcha demasiado larga.

Con todo, este problema poco a poco se ha ido corrigiendo y en los vehículos más modernos el uso del aire acondicionado, concretamente el funcionamiento del compresor, está sujeto a las propias condiciones de circulación. Esto implica que, en estos vehículos, cuando pisamos el acelerador a fondo el compresor se desconecta de igual forma que lo hace cuando alcanza la temperatura óptima, logrando así evitar la pérdida de potencia y la falta de respuesta del coche ante una maniobra de adelantamiento o al subir una cuesta. En los coches con tecnología de Stop&Start, el compresor también se desconecta en paralelo al propulsor cuando paramos el coche.

Aire acondicionado vs. ventanillas bajadas

Es la eterna pregunta. Qué consume más, circular con el aire acondicionado o hacerlo con las ventanillas bajadas. Pues bien, la respuesta es sencilla, sobre todo porque se han llevado a cabo una serie de estudios y pruebas de laboratorio para contestar esta cuestión. Hay que saber que el aire acondicionado siempre tiene el mismo consumo, algo que no se cumple con las ventanillas bajadas. En este caso, el consumo derivado de llevar las ventanillas abiertas depende de la velocidad. A mayor velocidad, mayor resistencia al aire y por lo tanto mayor consumo de combustible final.

Esto implica que, si circulamos a una baja velocidad, la resistencia al aire aumenta muy poco y, por lo tanto, circular con las ventanillas bajadas no afecta prácticamente al consumo. En este sentido, se podría decir que la ‘barrera de consumo’ está en torno a los 80 km/h. Por debajo de esta velocidad, el consumo derivado del aumento de la resistencia al aire por circular con las ventanillas bajadas es menor que el consumo del aire acondicionado, pero a partir de esta velocidad es más eficiente llevar el aire acondicionado encendido y las ventanillas subidas en términos de consumo de combustible.

El uso inteligente del aire acondicionado, sobre todo tras subirnos al coche después de estar estacionado, puede reducir el consumo del compresor

Cómo reducir el consumo del aire acondicionado

Una vez desgranadas todas las claves sobre el consumo del aire acondicionado, cabe señalar que nosotros como conductores tenemos la posibilidad de reducir ligeramente su consumo con una serie de hábitos o buenas prácticas, lo que se traduce en reducir ligeramente el consumo de combustible del coche. El primero es intentar aparcar el vehículo en sombra o bajo techo, ya que así la temperatura del habitáculo del coche no subirá tanto y el esfuerzo del compresor del aire acondicionado será menos prolongado, ya que el sistema tardará menos en alcanzar la temperatura que le solicitamos desde el climatizador.

Como es lógico, esto no siempre es posible y es por ello que, si tenemos que aparcar en la calle y el coche queda a pleno sol, lo mejor para optimizar el funcionamiento del aire acondicionado es ventilar el vehículo y circular los primeros minutos con las ventanillas bajadas incluso con el aire encendido, con el fin de bajar la temperatura del interior del coche y sacar del habitáculo la mayor cantidad de aire caliente posible. De esta forma vamos a conseguir que el primer gran esfuerzo de todo el sistema del aire acondicionado sea menor que si sólo activamos directamente el climatizador sin bajar las ventanillas.

El artículo Cuánto combustible consume el aire acondicionado del coche fue publicado originalmente en Urban Tecno.

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