Cuánto cuesta convertir un coche a GLP y cómo es el proceso

La implementación de las Zonas de Bajas Emisiones en nuestro país ha traído bastante polémica, sin contar, además, el sistema de etiquetas de colores que ha establecido la DGT es bastante impreciso y deja mucho que desear. Con las condiciones económicas en las que nos encontramos, que nos prohíban circular con un coche que tiene ciertos años es un gran impedimento para muchos de nosotros.

El tema de las ZBE ha traído bastante cola, y mucha gente ha hecho todo lo posible para vender su coche actual y adquirir uno más sencillo, pero con la hibridación suficiente como para poder lucir la tan ansiada etiqueta ECO. En el artículo de hoy os vamos a explicar un pequeño «truco» que existe todavía, que es el de convertir un coche normal a GLP. Gracias a esta excepción, podrás llevar la misma pegatina, pero sin tener que deshacerte de tu vehículo.

¿Qué es el GLP y por qué es ECO?¿Qué coches se pueden convertir a GLP?Requisitos para tener la etiqueta ECO al convertir a GLP¿Se puede convertir un coche diésel a GLP?¿Puedo comprar directamente un coche GLP?¿Qué proceso se hace para convertir un coche a GLP?Instalación del depósito de GLP y líneas de combustibleCambios en el sistema de alimentación y centralita¿Cuánto cuesta instalar un kit de GLP en un coche?¿Hay más ventajas con el GLP más allá de la etiqueta ECO?Consumo y precioMenos contaminaciónSin problemas de autonomía¿Mejor para tu motor?¿Cuáles son los mejores coches para convertir a GLP?Conclusiones finales sobre la conversión de vehículos a GLP

¿Qué es el GLP y por qué es ECO?

Así es la válvula de llenado de los vehículos GLP

Cuando hablamos de un coche que funciona con GLP, en realidad nos referimos a que utiliza gas licuado de petróleo. Se trata de un combustible alternativo bastante más limpio que la gasolina y el diésel, debido a que su combustión produce menos emisiones de dióxido de carbono.

El GLP ha tenido menos repercusión aquí en España que en otros países de la Unión Europea como Italia, Turquía o incluso Polonia, donde es uno de los combustibles más demandados. De hecho, mientras este combustible se daba a conocer en nuestro continente, el GLP se ha beneficiado de no pocos incentivos fiscales, lo que se ha traducido en precios muy bajos.

Lo verdaderamente positivo del GLP es que no necesitas comprar directamente un coche con este combustible. La mayor ventaja es que el GLP se puede utilizar en muchos de los coches que circulan hoy día por nuestro país. Tan solo hay que pasar por taller para hacer una «conversión», que no es más que instalar el depósito y el sistema para hacer llegar el combustible al motor. En definitiva, podríamos decir que esta es la fórmula más sencilla (e incluso asequible) de conseguir la etiqueta ECO.

¿Qué coches se pueden convertir a GLP?

Si tu coche gasolina cumple con el estándar EURO 4, puedes pasarlo a ECO

Entremos en materia, y no con buenas noticias. No todos los vehículos se pueden adaptar para funcionar con GLP. O, por lo menos, no todos se pueden adaptar para que «cuele» esto de la etiqueta ECO.

En la práctica, la mayor parte de los coches que se convierten a GLP son de gasolina. El proceso se puede adaptar también a los coches diésel, aunque la práctica no es tan común ni está tan extendida por el momento. Hablaremos de esto un poco más adelante.

Dentro de la norma que regula la conversión de vehículos a GLP, que es la normativa ECE/ONU R-115, se establece también que el motor que va a hacer la transición no debe tener más de 460 CV de potencia. Esto último se debe a que el GLP rinde menos que la propia gasolina, lo que se traduce en una pérdida significativa de potencia cuando se utiliza el combustible alternativo.

Requisitos para tener la etiqueta ECO al convertir a GLP

Como decimos, el principal atractivo de la conversión a GLP es tener la etiqueta ECO. Sin embargo, que tengas un coche que funciona con GLP no significa que tengas derecho a este distintivo ambiental. Hay unos requisitos adicionales que no podemos pasar por alto:

Para que un coche de gasolina pueda convertirse a GLP, debe cumplir con las normativas de emisiones EURO 4, EURO 5 o EURO 6. Básicamente, el coche de base debe homologar Etiqueta C. Esto deja prácticamente fuera a todo coche gasolina matriculado antes de 2006, aunque luego te contaremos algunas excepciones.En el caso de los coches diésel, el requisito es que cumplan con el EURO 6, que corresponde también a la Etiqueta C (vehículos con matriculación posterior al año 2015).

Pero ojo, que no te den la etiqueta, no significa que no puedas hacer la conversión en sí. Adicionalmente, hay excepciones. Si el coche que quieres convertir tiene Etiqueta B (Euro 3 gasolina o Euro 5 diésel) y ese mismo coche homologó más tarde las emisiones para el estándar siguiente, deberías poder hacer la conversión y conseguir la etiqueta.

¿Se puede convertir un coche diésel a GLP?

El proceso de transformar un coche diésel a GLP o GNC (gas natural comprimido) es posible, aunque requiere una conversión prácticamente a medida. Los motores diésel no usan chispa, por lo que el gas jamás va a detonar por compresión.

Para solucionar este problema, el gas se mezcla con el aire en la admisión y se añade a los cilindros junto a la mínima cantidad de diésel necesaria para iniciar la combustión. Como resultado, se obtiene un vehículo «Dualfuel» (que no bifuel). El sistema debe llevar incluso centralitas independientes para controlar determinados procesos, como la regeneración del filtro de partículas.

Convertir un coche diésel a GLP es más caro que hacer lo equivalente con un vehículo de gasolina. La rentabilidad de la inversión es más baja, aunque sí que puede venir bien a conductores profesionales. Vehículos diésel con Etiqueta C pasan automáticamente a poseer la ECO tras la transformación. No obstante, existe un caso en España de la empresa Dimsport que ha conseguido pasar un Seat León con etiqueta B a ECO haciendo una de estas transformaciones, lo cual es una noticia muy positiva.

¿Puedo comprar directamente un coche GLP?

Dacia ha jugado muy bien con su gama asequible de vehículos bifuel

Sí, y vienen también con la etiqueta ECO de serie. Uno de los fabricantes que más ha apostado por esta tecnología es el Grupo Renault, por lo que vas a poder encontrar muchos modelos de Dacia y Renault con motores gasolina-GLP en sus catálogos (Dacia Sandero, Dacia Duster, Renault Captur…).

En el Grupo Volkswagen también han existido algunos modelos con motores TGI, solo que en este caso, son motores de gas natural-gasolina, por lo que son diferentes.

¿Qué proceso se hace para convertir un coche a GLP?

Para convertir un coche a GLP hay que suministrarle al vehículo una línea de alimentación alternativa. Y esto es importante que lo sepas, pues tu vehículo no va a ser únicamente GLP, sino que pasará a ser un coche bifuel. Podrá ser alimentado tanto por la gasolina como por el propio gas licuado de petróleo.

Instalación del depósito de GLP y líneas de combustible

El depósito suele ponerse en el sitio de la rueda de repuesto para ahorrar espacio

El componente primordial de este sistema es el depósito de GLP. En algunos deportivos muy pequeños, la conversión no sale a cuentas porque apenas hay espacio para poder ubicarlo. En la mayoría de los casos, este nuevo depósito se suele ubicar en el espacio que tenemos para la rueda de repuesto. La capacidad depende fundamentalmente del espacio que exista. En cuanto a qué hacemos si sufrimos un pinchazo, tendrás que sustituir la rueda de repuesto por un kit antipinchazos.

Para repostar el GLP, hace falta instalar una boquilla de llenado. Por desgracia, no hay un estándar para toda Europa, por lo que, si sales de España, vas a tener que usar adaptadores si quieres seguir repostando GLP —recordemos que en todo momento vas a poder utilizar el combustible normal—.

Del depósito de GLP al motor, se tienen que montar unas tuberías, así como un conversor que hace que el líquido pase a forma gaseosa, que es el estado correcto en el que funciona este producto.

Cambios en el sistema de alimentación y centralita

Vista de un Dacia Sandero con instalación de GLP (Imagen: Dacia FR)

En la parte del motor, también hay que hacer bastantes cambios. Los motores gasolina tienen determinadas características que los hacen únicos, cosa que también ocurre con los propulsores diésel. Para que un motor pueda funcionar con gasolina-GLP, hay que adaptar principalmente los inyectores.

Para proteger determinados componentes como la culata y la junta de la culata, estos dos elementos se refuerzan con una serie de aditivos, con la finalidad de que el gas no pueda escapar por ahí.

Por último, hay que hacer bastantes cambios a nivel electrónico. La centralita (ECU) que viene de serie en el coche no va a poder administrar este nuevo sistema secundario de alimentación, así que hay que sustituirla o reprogramarla. Junto a esta modificación, hay que añadir al kit una serie de sensores para que la propia ECU pueda leer en tiempo real la cantidad de combustible que está entrando a los cilindros.

¿Mi coche gasolina-GLP puede funcionar al 100% con GLP?

En la mayoría de los casos, el motor siempre va a encender con la gasolina, pues es necesario para arrancar el motor y ponerlo en temperatura para el gas. Luego, la ECU siempre va a exigir un porcentaje de gasolina mínimo. Muchos coches en temperatura óptima tienen un consumo 90-10 (90% GLP, 10% gasolina).

¿Cuánto cuesta instalar un kit de GLP en un coche?

Aunque es una operación costosa, se puede amortizar en apenas 40.000 kilómetros

Hablemos de precios. Hace unos años, cuando comentábamos este tipo de conversiones, la mayoría de la gente se echaba las manos a la cabeza por ser una operación bastante cara. La cosa ha cambiado. Los gobiernos están presionando para que nos pasemos a los coches con etiqueta ECO. Y, viendo los precios de los coches híbridos, la conversión a GLP parece ser la opción más sensata si tienes un coche funcional y que no se merece todavía pasar el resto de sus días en un desguace —aunque parezca broma, esto último también debe ser considerado ecologismo—.

Una instalación típica suele tener un precio entre los 2.000 y los 3.500 euros. Los precios han subido ligeramente durante los últimos años por la mayor demanda y la inflación, pero sigue siendo bastante asequible en comparación con la idea de comprar un híbrido, cuyos precios rara vez bajan de los 22.000 euros.

En cualquier caso, hay varios factores que van a determinar el coste total de la factura. Te enumeramos los más importantes para que vayas curado de espanto cuando pidas presupuesto:

Tamaño del motor: cuanto mayor sea la cilindrada, de mayor capacidad tendrán que ser algunos de los componentes. Lo mismo ocurre con el número de cilindros. Convertir un tricilíndrico de 1.000 centímetros cúbicos va a ser, por norma general, más económico que hacer la misma operación con un V6 de 3.6 litros.Tipo de inyección: aunque menos eficiente, los coches con inyección indirecta son más agradecidos a la hora de instalar estos kits. Los coches modernos con inyección directa no suelen ofrecer resistencia a este tipo de modificaciones, pero requieren más componentes para que puedan funcionar.Complejidad: si vas al taller con un Toyota —de esos modelos que suelen usar los taxistas—, para los profesionales será pan comido. Pero si vas con un coche más complicado, como puede ser un Mustang, la menor experiencia, sumada al exotismo del propio vehículo, pueden hacer que haya que echar más horas de la cuenta en el proceso.Calidad del kit: no todos los kits son iguales. Hay diferentes marcas, cada una con sus calidades. Si quieres componentes de la mejor calidad posible, tendrás que rascarte más el bolsillo.

A todo esto hay que sumar el precio de la mano de obra, que puede ser más alta o más baja en función de la ubicación o de lo especialistas que sean en el proceso. A propósito de esto último, hay talleres que se centran únicamente en este tipo de conversiones. Por tanto, te recomendamos que comiences investigando por ahí si tu intención es convertir tu coche.

¿Hay más ventajas con el GLP más allá de la etiqueta ECO?

Repostar GLP te va a costar bastante menos dinero

Las hay, y son muchas. Al principio del artículo hemos hablado de Polonia porque es un ejemplo de libro. En dicho país no se han implementado medidas muy especiales para limitar la movilidad en función de las emisiones de los vehículos. Sin embargo, los polacos han hecho una gran adopción de este combustible. Si no nos crees, echa un vistazo a webs de segunda mano como Otomoto. La gran mayoría de los vehículos de gasolina que se venden en esa web están ya convertidos.

Consumo y precio

Cuando conviertes un coche a GLP, pasa a consumir más combustible. Sin embargo, no es algo preocupante, pues hablamos de un incremento en el consumo alrededor del 10%. Un coche normal y corriente que consuma 7 litros de gasolina va a pasar a tener un consumo de unos 8 de GLP aproximadamente.

El aumento de consumo se equilibra automáticamente cuando hablamos de precios. El GLP, como alternativa a la gasolina, es un combustible sustancialmente más barato. En los últimos años, cotiza entre un 40 y un 50% más barato que la gasolina. Y aquí es donde tenemos la clave. ¿Por qué en algunos países de Europa se hacen tantas conversiones a GLP? Respuesta fácil: porque se acaba ahorrando dinero en combustible.

Menos contaminación

Algún ecologista puede llegar a pensar que esto de pillar un coche gasolina del 2007 y pasarlo a GLP es como meterle un gol a las normativas ambientales. Pero eso no es cierto.

Lo verdaderamente nocivo de los motores de combustión son los óxidos de nitrógeno y las partículas:

Cuando movemos un motor de combustión con GLP, estamos emitiendo alrededor de un 74% menos de estos NOx, cifras que pueden estar incluso por debajo de algunos coches que salen de fábrica con la etiqueta ECO.En cuanto a las partículas, también se reducen drásticamente, pudiendo bajar en un 80%.Por último, hay que hablar del CO₂. El menos malo de este trío también ve reducidas sus cifras en un 20%.

Como habrás podido notar, no es que se les dé la etiqueta ambiental a estos vehículos porque haya una vulnerabilidad en el reglamento. Es que, sencillamente, el coche pasará a contaminar sustancialmente menos.

Sin problemas de autonomía

Sin lugar a dudas, esta es una de las grandes bazas de los vehículos GLP frente a los vehículos con etiqueta 0 (eléctricos e híbridos enchufables). El coche GLP puede seguir funcionando con el combustible estándar. Si no encuentras una gasolinera que tenga GLP, no te vas a quedar tirado.

Por supuesto, la gracia aquí es que tú mismo vas a ser el que quiera repostar GLP. Al fin y al cabo, vas a ahorrar dinero si así lo haces. Por desgracia, en España no están tan extendidas las gasolineras que surten este combustible, aunque las principales cadenas como Repsol suelen tenerlo en la mayoría de sus estaciones.

¿Mejor para tu motor?

Esto último puede parecer que es demasiado bueno como para ser cierto, pero lo es. Una de las principales ideas que se nos pasan por la cabeza cuando planteamos esto de convertir el coche a GLP es si puede afectar a la durabilidad del propio motor. Al fin y al cabo, estamos haciendo modificaciones.

Pues bien, contra todo pronóstico, tenemos que decirte que la transición a GLP puede ser incluso beneficiosa para tu propulsor. El GLP es uno de los combustibles más limpios que existen. Durante su combustión también se producen menos depósitos de carbón y residuos (frente al diésel o la gasolina).

Al no generarse tanta carbonilla, el motor se mantiene más limpio. Esto último se traduce en menor cantidad de averías relacionadas con la carbonilla (EGR, admisión…), así como a un menor desgaste de las piezas móviles.

Hay algunos inconvenientes, aunque son mínimos. Obviamente, todo este sistema tiene un mantenimiento y hay que revisarlo cada cierto número de kilómetros que variará en cada caso particular. En algunas conversiones, las válvulas se pueden llegar a resecar, creando ciertos problemas con la inyección a la larga y teniendo que sustituir estos componentes y los asientos.

¿Cuáles son los mejores coches para convertir a GLP?

Salvo excepciones, la conversión a GLP va a ser posible siempre y cuando el vehículo que llevemos al taller cumpla con los requisitos suficientes para poder llevar a cabo la operación.

Nuestros vecinos europeos son muy proclives a convertir cualquier modelo de gasolina. No obstante, aquí en España, los coches que más se convierten son los de Toyota, tales como el Corolla, Auris y el Prius, probablemente porque el sector del taxi y el VTC apostó fuertemente por esos vehículos.

Antes de que Dacia decidiera lanzar sus propios coches con GLP de serie, también los propios usuarios eran los encargados de convertir coches como el Sandero, el Duster o el Logan. Actualmente, también se han popularizado las conversiones en modelos que están teniendo mucho éxito en ventas, como es el caso del Kia Sportage o el Hyundai Tucson.

Conclusiones finales sobre la conversión de vehículos a GLP

El motor que vamos a convertir tiene que adaptarse para incluir el combustible alternativo

España ha llegado bastante tarde a la fiesta del GLP. Durante años, este combustible ha cotizado a precios ridículos, y muchos de nuestros vecinos europeos han sabido aprovecharse del momento. En cualquier caso, aunque el precio del litro de GLP ya no es tan económico como hace 5 o 10 años, sigue saliendo rentable la conversión. De media, se puede amortizar en un periodo inferior a los 40.000 kilómetros.

Por otro lado, el GLP también nos deja ver que no todo es blanco o negro. Se puede conseguir la etiqueta ECO haciendo esta conversión, alargando así la vida de vehículos que tienen todavía vida por delante, y haciendo que el resto de los kilómetros que van a realizar, lo hagan con una menor huella de emisiones.

Por suerte, en España tenemos bastantes talleres especializados en este tipo de conversiones. Es de esperar que la demanda de estos servicios aumente, pues es obvio que no todo el mundo tiene capacidad económica suficiente para comprar en estos momentos un coche más sostenible. Además, la conversión de vehículos diésel está avanzando a buen ritmo, lo que es muy positivo, pues el parque automovilístico español tiene muchos vehículos con estos propulsores cuyos dueños no están dispuestos a deshacerse de ellos.

Si después de leer todo este artículo todavía tienes dudas sobre convertir o no, la mejor recomendación que podemos darte es que preguntes a los profesionales que más han utilizado el GLP durante los últimos años en España: los taxistas. Son los que más horas han conducido estos vehículos y los que mejor pueden describir los puntos fuertes y débiles que vas a encontrarte si te animas a hacer el proceso.

En cuanto a nuestra opinión, nos parece una decisión muy sabia si tienes un vehículo que está en condiciones mecánicas lo suficientemente buenas como para poder rentabilizar la inversión y llegar a ahorrar dinero en el medio plazo.

El artículo Cuánto cuesta convertir un coche a GLP y cómo es el proceso fue publicado originalmente en Urban Tecno.

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