La inteligencia artificial se está usando en multitud de sectores y para todo tipo de fines. Desde el invento que caza mosquitos usando rayos láser hasta la detección de olas gigantes que pueden provocar daños incalculables, pasando por el programa de drones autónomos de IKEA para ayudar a los trabajadores en labores de inventario y logística. Cada día que pasa, las posibilidades se multiplican.
Sin embargo, la imparable evolución de las herramientas basadas en inteligencia artificial no están exentas de preocupación. Más allá de la privacidad, mucha gente teme que acabe con millones de puestos de trabajo que, hasta ahora, estaban siendo realizados por seres humanos de carne y hueso.
Yo mismo, como periodista graduado, he pensado en reiteradas ocasiones sobre las consecuencias de ChatGPT, el archiconocido chatbot que es capaz de mantener conversaciones realistas y proporcionar todo tipo de información bien redactada y explicada en cuestión de segundos.
Pero no solo están en peligro los periodistas que escriben, ya sea para periódicos y revistas de papel o en medios digitales, sino también los que se ponen en frente de la cámara. Y es que un medio local de Hawaii ha empezado a «contratar» a periodistas y reporteros generados por inteligencia artificial.
James y Rose, dos «periodistas» un tanto inquietantes
No es ningún secreto que los medios de comunicación de ámbito local no disponen de los mismos recursos que tienen los de ámbito nacional. Incluso entre los de un mismo «grupo» puede haber notables diferencias en tema presupuestos, ya que no es lo mismo una redacción asentada en una ciudad que una de un pequeño pueblo de pocos miles de habitantes.
Por este motivo, no siempre es posible contratar a toda la gente que se necesitaría para mantener una plantilla y flujo de trabajo en condiciones, teniendo los trabajadores que convertirse en «navajas suizas» capaces de redactar, locutar y producir ingentes cantidades de información.
Las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial, por suerte o por desgracia, pueden ayudar en este aspecto. Un periodista ha contado a WIRED cómo el periódico local en el que trabajaba, The Garden Island, ha «contratado» a dos nuevos reporteros algo peculiares.
Este es uno de los presentadores generados con IA de Caledo
James y Rose no son personas, aunque lo parezcan a través de la pantalla: son dos avatares generados con inteligencia artificial desarrollados por la compañía israelí Caledo, la cual espera llevar su tecnología a cientos de medios locales en el próximo año.
La plataforma desarrollada por Caledo es capaz de analizar varios artículos escritos previamente para transformarlos en una «emisión en vivo». Presenta una conversación entre presentadores generador por inteligencia artificial, como pueden ser James y Rose.
Si bien no es algo enteramente nuevo, pues algunos medios ya han empezado a juguetear con presentadores creados mediante herramientas IA, la novedad que presenta Caledo es la de que sus presentadores digitales sí pueden «interactuar» entre ellos, manteniendo una especie de conversación, como se vería en un noticiero convencional.
La intención de Caledo no es sustituir a las personas, sino ofrecer a redacciones de pequeños medios locales la posibilidad de crear transmisiones en vivo que no serían capaces de hacer de otra forma, abriendo así la puerta a más ganancias mediante publicidad o atraer a más público.
Si bien la tecnología de la compañía israelí está bastante avanzada, todavía tiene aspectos por pulir. Poniendo de ejemplo a Jake y Rose, estos presentadores digitales tienen problemas para pronunciar algunas palabras, además de que no suelen parpadear, generando una sensación de incomodidad propia del valle inquietante, muy habitual en todo tipo de robots humanoides.
El artículo Un medio de Hawaii “contrata” presentadores generados con IA para atraer nuevas audiencias fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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