Astrónomos han recogido del espacio unas ondas que han viajado durante 8.000 millones de años y que aún no tienen una explicación científica

Desde el origen de universo, se ha ido conformando un entorno cósmico en el que conviven planetas, estrellas, agujeros negros y otros cuerpos celestes, que únicamente representan alrededor de un 5% de la composición total del universo. El resto, quizás materia oscura o energía oscura, es un misterio reservado para nuestros descendientes. Y si hablamos de misterios, ¿quieres conocer qué tipo de señal ha viajado durante 8.000 millones de años?

Las ráfagas de radio que han viajado 8.000 millones de años por el espacio

No es la primera vez que escuchamos y te hablamos del término FRB, más conocido como ráfaga rápida de radio. Ahora, un artículo publicado en la revista científica Science nos invita a conocer a una de estas FRB, que ha sido denominada FRB 20220610A. Después de viajar 8.000 millones de años por el espacio, su señal ha sido interceptada en la Tierra, siendo una de las señales de radio más lejanas y poderosas jamás detectadas.

Estamos hablando de una ráfaga rápida de radio que ha emitido la energía equivalente a lo que produciría nuestro Sol durante casi 30 años. Y esto no es lo más alucinante. Además, esta señal parece haber sido producida en milésimas de segundo, casi sin darte tiempo a parpadear. Los astrónomos responsables del descubrimiento acudieron a la matriz de radiotelescopios SKA Pathfinder para detectar el FRB y poder establecer de dónde procedía.

El doctor Stuart Ryder, astrónomo de la Universidad Macquarie de Australia, es uno de los científicos involucrados en el descubrimiento. Él mismo asegura que ‘utilizamos los radiotelescopios de ASKAP para, hábilmente, determinar con precisión de dónde procedía la ráfaga’. Y es que estos FRB parecen ser eventos habituales en el universo y podrían ser de gran utilidad para continuar comprendiendo su naturaleza.

Ryan Shannon, profesor del Centro de Astrofísica y Supercomputación de la Universidad Tecnológica de Swimburne, asegura que las ráfagas rápidas de radio podrían llegar a ser utilizadas para ‘crear un nuevo mapa de la estructura del universo y para responder a grandes preguntas acerca de la cosmología’. Y es que las FRB podrían ser utilizadas para descubrir esa materia que compone el universo, pero que aún no podemos detectar.

Muchos científicos piensan que parte de ese 95% de la materia que no se ve con nuestros instrumentos podría existir en formas complejas de observar, como sería el caso de nubes de hidrógeno. Y se tiene mucha fe en las ráfagas rápidas de radio, ya que podrían servirnos para detectar materia no observable, dado que son capaces de ver electrones y medir materia en espacios que nosotros detectamos como vacíos.

Eso sí, por el momento desconocemos el origen exacto de muchas de estas ráfagas rápidas de radio y mucho menos qué las está provocando para que, en ciertas ocasiones, se abran paso hasta nuestro recóndito rincón del universo. Desvelar su misterio podría conducir a una nueva era de exploración del cosmos y a desentrañar nuevos enigmas.

El artículo Astrónomos han recogido del espacio unas ondas que han viajado durante 8.000 millones de años y que aún no tienen una explicación científica fue publicado originalmente en Urban Tecno.

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