Parece que se ha convertido en una especie de tradición anunciar los sucesivos aumentos de tensiones en Asia con las pruebas armamentísticas de Corea del Norte. A principios de año ya cubrimos una de ellas y ahora, hace unos días, ha vuelto a levantarse las voces en contra de las prácticas del régimen norcoreano. Esta vez el líder Kim Jong-un ha estado presente en la prueba de lanzamiento de varios misiles balísticos y de su anuncio de que está reforzando su arsenal nuclear.
Si a cualquiera que anda tranquilamente por la calle le mencionas «Corea del norte» y «Kim Jong-un» mencionará con seguridad que es un país militarista y hablará de sus misiles. Es más, hace años, durante la presidencia de Donald Trump este apodó de manera cariñosa al líder norcoreano como «Rocketman» (El hombre cohete) por sus sucesivos anuncios sobre la potencia de sus armas. Hasta ahora sabemos que tiene misiles supersónicos, otros que provocan tsunamis radioactivos y nucleares. Pero no es solo eso lo que tiene este país, también tanques modernos y mucha artillería.
Corea del Norte la vuelve armar con sus anuncios sobre nuevas armas
El pasado 2 de julio la agencia de noticias AP News advirtió que Corea del Norte presumía de un nuevo misil con capacidad para transportar una ojiva convencional «de gran tamaño». Los analistas no creyeron las palabras dichas desde la capital del país, Pionyang. No obstante, parece que estos expertos han tenido que comerse sus palabras cuando hace unos pocos días el ejército norcoreano ha probado con éxito esta arma y otra más con capacidad para armar ojivas nucleares.
Pese a las tensiones que hay, el conflicto es latente, puesto que Corea del Norte no ha sido responsable de ninguna muerte. El problema está en el mero hecho de que sus misiles de prueba suelen pasar «cerca» de países aliados de Estados Unidos o de Corea del Sur. Aunque a estos últimos lo que le envían a menudo son bolsas de basura atadas en globos sondas. Por tanto, realmente la tensión sigue igual que siempre y no hay peligro de una escalada mayor, si es que es lo que pensaban algunos.
El líder norcoreano Kim Jong-un y su hija cerca de un lugar de lanzamiento de un misil balístico (Agencia de noticias norcoreana)
Negar que Corea del Norte es una país militarista sería absurdo. Ellos mismos son quienes mes a mes ensalzan las glorias de su ejército y de las nuevas armas que poseen. Aun así la prueba de misiles y los anuncios de refuerzo de su arsenal nuclear tiene como objetivo disuadir a sus enemigos de pensar en cualquier represalia contra Pionyang. No es para menos, Corea del Norte es la última frontera de la Guerra Fría creada en 1953 tras el armisticio en la guerra con sus vecinos del sur. El paralelo 38 divide ambos países desde hace 70 años, por tanto el tener un ejército fuerte y modernizado se ha convertido en un sine qua non para la pervivencia del régimen.
Por el momento no hay más información al respecto, estamos de acuerdo con la web especializada Military que ha mencionado que las pruebas se tratan de un mensaje hacia el mundo exterior. Es evidente que lo es y estamos seguros de otra cosa, que este tipo de mensajes no van a cesar mientras Corea del Norte sienta que su sistema está en peligro por actores externos.
El artículo Corea del Norte vuelve a la carga: sus vecinos dicen que tienen nuevos misiles y armas nucleares fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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