La evolución de la infraestructura viaria ha sido clave para mejorar la seguridad y la eficiencia del tráfico. A lo largo del tiempo, se han implementado diversas soluciones para gestionar el flujo de vehículos de mejor forma, tanto en zonas urbanas y rurales. Uno de los avances en este aspecto ha sido el uso de carriles trenzados, una disposición de carriles que permite una integración fluida de vehículos entre incorporaciones y salidas de una vía principal, ya que estos carriles se ‘trenzan’ para facilitar el acceso o salida de autovías y autopistas sin que por ejemplo rodemos por debajo de la velocidad mínima de la vía.
Al final, el concepto de carril trenzado nace de la necesidad de encontrar solución a un punto conflictivo del tráfico, como en su momento pudo pasar con las soluciones para disminuir la velocidad en travesías, donde la exposición de los peatones es mayor. Sólo hay que mirar la evolución de las travesías con la inclusión de elementos reguladores del tráfico o la proliferación de los carriles trenzados para entender la adaptación que sufre la infraestructura viaria con el paso del tiempo.
Qué es un carril trenzadoCómo debo circular en un carril trenzadoQuién tiene prioridad en un carril trenzadoSi vas por la vía principal y te incorporas al carril trenzadoSi vas por el carril trenzado y te incorporas a la vía principalSi ambos vehículos cambian de trayectoriaSeñales que indican la presencia de un carril trenzado
Qué es un carril trenzado
Un carril trenzado es un tipo de infraestructura vial diseñada para mejorar la fluidez del tráfico y la seguridad en tramos de carretera donde se producen intersecciones complejas o flujos intensos de vehículos. Consiste en una disposición de carriles de circulación que se entrelazan o ‘trenzan’ de manera planificada, lo que permite que los vehículos cambien de carril de forma ordenada sin necesidad de realizar maniobras peligrosas o difíciles. Esta disposición permite una mejor distribución entre el tráfico principal y las incorporaciones y salidas de vehículos hacia o desde la vía principal.
El carril trenzado es cada vez más frecuente en vías de alta capacidad donde por diseño se entrelazan la incorporación a una autovía y autopista con la siguiente salida, utilizando un mismo carril para ambas. De esta manera, estos carriles permiten organizar el tráfico de tal manera que este se ‘trenza’ a medida que los vehículos avanzan, lo que genera un flujo más eficiente en el cambio de carriles y, por ende, se reduce la congestión. Aunque este tipo de carriles permite mejorar la circulación, requiere tener muy claro cómo hay que actuar en los mismos y siempre realizar las maniobras de cambio de carril con precaución.
Cómo debo circular en un carril trenzado
Circular en un carril trenzado requiere atención y adaptación por parte de los conductores con el fin de permitir que el flujo del tráfico sea adecuado y que haya un intercambio de carriles que sea eficaz y eficiente. Para circular de manera segura y eficiente en un carril trenzado, es fundamental seguir ciertas pautas. En primer lugar, como conductores tenemos que estar atentos a la señalización vial, sobre todo a las marcas en el asfalto, ya que nos va a indicar de forma clara cuándo y cómo debemos cambiar de carril.
Es crucial no forzar el paso a otro carril de manera brusca, sino hacerlo con suavidad y cuando las condiciones del tráfico lo permitan. Mantener una distancia de seguridad adecuada con el vehículo que también se encuentra en el carril trenzado es fundamental. Además, hay que estar especialmente atento a los movimientos del resto de vehículos y preparados para reducir la velocidad si es necesario, ya que suelen ser escenarios con mucho tráfico. En todo caso hay que respetar el límite de velocidad de la vía y las reglas de circulación.
Quién tiene prioridad en un carril trenzado
Teniendo en cuenta que en un carril trenzado se producen cruces de trayectorias en un espacio muy corto, la pregunta del millón es quién tiene prioridad de paso en un carril trenzado, sobre todo cuando el tráfico es denso. Vamos a intentar responder a esta pregunta, aunque hay que tener muy claro que para moverse en un carril trenzado hay que observar el entorno, señalizar la maniobra y adaptar la velocidad y la distancia de seguridad a los requerimientos del momento.
Si vas por la vía principal y te incorporas al carril trenzado
Si te encuentras circulando por la vía principal y necesitas incorporarte a un carril trenzado, es esencial que sigas algunas pautas para garantizar una maniobra segura y fluida. Primero, observa cuidadosamente la vía y evalúa la ubicación y velocidad de los vehículos que circulan en el carril trenzado a tu derecha. Es importante que tengas claro si el vehículo que circula por ese carril tiene intención de abandonarlo, ya que, si no lo va a hacer, tendrá prioridad sobre ti.
En general, si te incorporas desde una autopista o autovía a un carril trenzado, los coches que ya circulan por el carril trenzado tienen prioridad. Sin embargo, el conductor que se encuentra en este carril debe facilitarte la salida, siempre que las circunstancias del tráfico lo permitan y haya suficiente espacio. Antes de realizar la maniobra, asegúrate de señalizar correctamente tu intención de incorporarte al carril trenzado utilizando el intermitente con suficiente antelación. La incorporación debe ser gradual, no brusca, y a una distancia de seguridad que permita a los otros conductores adaptarse a tu cambio de carril y reaccionar a tiempo si es necesario.
Si vas por el carril trenzado y te incorporas a la vía principal
Cuando te incorporas a la vía principal desde un carril trenzado es fundamental realizar la maniobra con precaución y anticipación. Primero, observa cuidadosamente la vía a la que vas a incorporarte, de forma que puedas evaluar el tráfico y decidir el momento adecuado para hacerlo. Asegúrate de que tienes una buena visibilidad y de que hay suficiente espacio para integrarte de manera segura. Es importante ceder el paso a los vehículos que ya circulan por la vía principal, ya que tienen prioridad.
Con todo, la teoría dice que los otros conductores deben facilitarte la incorporación siempre que sea posible, ajustando su velocidad para permitirte entrar con seguridad. En todo caso, nosotros como conductores tenemos que adaptar la velocidad a la de los coches que circulan por la vía principal. Si es necesario, podemos acelerar suavemente para ponernos al ritmo del tráfico y evitar frenazos innecesarios. En todo caso, la maniobra debe ser fluida, evitando movimientos bruscos. Como siempre, hay que señalizar la incorporación con el intermitente, de modo que los conductores estén al tanto de nuestras intenciones.
Si ambos vehículos cambian de trayectoria
Cuando ambos coches cambian de trayectoria hacia y desde un carril trenzado y vía principal es esencial respetar las normas de prioridad de paso establecidas en el Reglamento General de Circulación. Eso significa que el vehículo que se incorpora a una vía debe ceder el paso a los que ya están circulando en ella, ya que cuando se realiza un cambio de carril en el que se lleva a cabo un desplazamiento lateral, se debe ceder el paso al otro vehículo que ya se encuentra en el carril al que desea uno incorporarse. ¿Y entonces quién tiene prioridad?
En esta situación, en la que los dos coches tienen que cambiar su trayectoria y de carril, ambos deben tener en cuenta estas normas de prioridad. El conductor del coche que circula por la vía principal debe levantar el pie del acelerador para reducir su velocidad para incorporarse al carril trenzado por detrás del coche que circula por él. Mientras tanto, el vehículo que va por el carril trenzado debe acelerar de manera suave y progresiva para incorporarse por delante del coche que está en la vía principal, siempre sin realizar una maniobra brusca.
Señales que indican la presencia de un carril trenzado
Las señales P33 y P35 indican la presencia de un carril trenzado, si bien sólo la última de ellas está asociada realmente a este tipo de disposición viaria. En este sentido, la señal P33 es una señal de advertencia que indica la proximidad de un tramo de carretera que puede tener visibilidad reducida, alertando a todos los conductores sobre esta circunstancia. Aunque se suele utilizar ante condiciones climáticas adversas, también pueden estar en el entorno de un carril trenzado.
Por su parte, la señal P35 se utiliza para señalar el inicio de un carril trenzado y va acompañada de flechas que indican las direcciones de los carriles y cómo se integran a la vía principal, alertando del peligro que puede existir por estos movimientos de carril. Esta señal tiene como objetivo alertar de la presencia de un carril trenzado y que así los conductores puedan tomar las medidas oportunas para llevar a cabo las maniobras de incorporación o salida con seguridad.
El artículo Qué son los carriles trenzados y cómo debes circular por ellos fue publicado originalmente en Urban Tecno.
Dejar una contestacion