La inteligencia artificial tiene un alto consumo energético. Esto no debería sorprendernos: cada vez hay más proyectos basados en esta tecnología: desde el archiconocido ChatGPT, cuyas últimas actualizaciones lo han hecho más «inteligente», dotado de una voz mejorada y convertido en un interesante motor de búsqueda que puede competir con Google, hasta en la industria de los efectos visuales para cine que busca revolucionar la forma de hacer películas.
Tras una investigación, se ha concluido que elaborar un texto de 100 palabras, como un correo electrónico, puede consumir alrededor de 519 mililitros de agua. Si esto te parece poco, puede que te sorprenda más saber que entrenar al modelo de inteligencia artificial GPT-3 necesitó 700 mil litros de agua.
Por si esto fuera poco, se prevé que para el año 2030 existan hasta cinco millones de toneladas de desechos por un simple motivo: la inteligencia artificial es cada vez más potente y requiere ordenadores y servidores a la altura para funcionar correctamente. Pero esto no es todo, y es que puede que no haya casi suficiente energía en el mundo dentro de unos pocos años para alimentarla.
Casi la mitad de los centros de datos de IA no tendrán energía suficiente para funcionar en 2027
Las grandes compañías tecnológicas están apostando por la inteligencia artificial. Esta tecnología requiere de centros de procesamiento de datos para funcionar, motivo por el que Microsoft quiere convertir México en uno a gran escala mediante una inversión mil millonaria. Y para que estos centros de datos funcionen, se requiere mucha energía eléctrica.
Este tema no es ajeno a las grandes tecnológicas. Algunas están apostando por usar reactores nucleares de pequeño tamaño para abastecerlas, como es el caso de Google y también la idea de Amazon. No obstante, a los reguladores de Estados Unidos no les ha parecido una buena idea.
Si bien de momento la situación es relativamente sostenible, puede no serlo dentro de unos pocos años. Y es que el rápido auge y crecimiento de las herramientas de inteligencia artificial y IA generativa están provocando un aumento en el consumo de electricidad. Se estima que el crecimiento sea del 160% en apenas dos años, lo que provocará que el 40% de los centros de procesamiento de IA no podrán operar.
Estos datos han sido publicados por Gartner, una empresa consultora y de investigación de las tecnologías de la información. En palabras de Bob Johnson, analista vicepresidente en Gartner:
El crecimiento explosivo de nuevos centros de datos a hiperescala para implementar inteligencia artificial generativa está creando una demanda insaciable de energía que excederá la capacidad de los proveedores de servicios públicos para expandir su capacidad lo suficientemente rápido. A su vez, esto amenaza con alterar la disponibilidad de energía y provocar escasez, lo que limitará el crecimiento de nuevos centros de datos para GenAI y otros usos a partir de 2026
Gartner estima que la energía necesaria para abastecer los servidores optimizados para inteligencia artificial alcanzará los 500 teravatios (TWh) por hora para el año 2027, que es 2,6 veces más que en 2023. Ante este problema, Gartner recomienda a las organizaciones que determinen los riesgos que podrían tener los posibles cortes de energía en los productos y servicios.
El artículo La inteligencia artificial está al borde del colapso: casi no hay suficiente energía en el mundo para ella fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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