Cómo saber qué cadenas de nieve necesita tu coche

La conducción invernal de un vehículo presenta desafíos específicos debido a las condiciones climáticas extremas, como nieve, hielo y temperaturas bajo cero. Es fundamental adaptarse a estas circunstancias para garantizar la seguridad al volante ya que el pavimento puede estar resbaladizo por la presencia de nieve o hielo. En este sentido, el uso de cadenas para la nieve puede ser esencial cuando las condiciones empeoran, ya que permiten obtener una mayor tracción sobre superficies heladas o cubiertas de nieve.

Las cadenas ayudan a evitar deslizamientos y mejoran el control del vehículo. En este sentido, tan importante es saber qué tipo de cadenas pueden responder mejor en nuestro coche como el hecho de instalarlas correctamente, ya que un mal montaje puede anular cualquier beneficio de este componente. El uso adecuado de las cadenas para nieve se antoja por este motivo como un factor decisivo para garantizar un viaje seguro en condiciones adversas, minimizando riesgos y facilitando la movilidad en carreteras de difícil tránsito, más allá de otras opciones como el uso de ruedas ‘all season’.

Qué tipos de cadenas de nieve hayCadenas líquidasCadenas metálicasCadenas de tela o cadenas textilesCadenas de red o cadenas compuestasCadenas semiautomáticasEn qué ruedas se colocan las cadenas del cocheCómo saber qué cadenas debe montar mi cocheCómo poner las cadenas de nieve en las ruedas

Qué tipos de cadenas de nieve hay

De un tiempo a esta parte han aparecido nuevas opciones de cadenas para coches, por lo que existen distintos tipos de cadena que pueden responder a diferentes necesidades, condiciones y condicionantes. Según las características de la carretera por la que vamos a transitar y de las propias características del vehículo conviene elegir más un tipo u otro. Y es que incluso el todopoderoso Cybetruck de Tesla es susceptible de quedar atrapado en la nieve.

Cadenas líquidas

Pese a su nombre, las cadenas líquidas no son otra cosa que un spray diseñado para aplicarse sobre la banda de rodadura del neumático. Su función principal es aumentar temporalmente la adherencia del vehículo en situaciones puntuales de nieve o hielo. Este producto puede ser útil en emergencias o cuando se necesita una ayuda momentánea para salir de una zona difícil. Sin embargo, este producto no es adecuado para circular en condiciones donde sea obligatorio el uso de cadenas, ya que no ofrece una tracción suficiente ni duradera.

El precio de las cadenas líquidas varía entre 5 y 7 euros, lo que las hace una opción económica. No obstante, su nivel de seguridad es bajo, por lo que no se recomienda su uso como solución principal para la conducción invernal. Al final, las cadenas líquidas son útiles de forma puntual, pero no deben sustituir a las cadenas tradicionales o neumáticos de invierno cuando las condiciones lo exigen.

Cadenas metálicas

Las cadenas de nieve clásicas con eslabones metálicos son las más utilizadas y tradicionales, ofreciendo una conducción segura sobre nieve y hielo. Son la opción más económica, con precios que oscilan entre los 20 y los 50 euros, y destacan por su durabilidad y fiabilidad, siendo la opción recomendada cuando las nevadas cubren las carreteras y las ruedas comienzan a derrapar.

No obstante, su montaje puede resultar complicado y requieren un poco de práctica. Además, son pesadas, ruidosas y pueden generar vibraciones en la conducción o interferencias en el sistema ESP de nuestro coche. Aunque no se recomienda su uso en superficies libres de nieve, ya que pueden provocar daños tanto en el neumático como en las llantas, no dejan de ser una de las soluciones más efectivas cuando las carreteras se tiñen de blanco.

Cadenas de tela o cadenas textiles

Las cadenas de tela o cadenas textiles son una opción muy popular debido a su ligereza y facilidad de montaje. Consisten en una funda de tela que cubre la banda de rodadura del neumático, lo que las hace especialmente convenientes para aquellos que buscan una solución rápida y sencilla. Son suaves durante la circulación, lo que minimiza el impacto en el vehículo, y son compatibles con sistemas de seguridad como el ABS y el ESP.

Sin embargo, su durabilidad es menor que la de las cadenas metálicas, ya que se desgastan más rápido. En este sentido, es fundamental no superar la velocidad recomendada por el fabricante para evitar reducir su vida útil. Su precio varía entre los 30 y 100 euros, lo que las convierte en una opción accesible. En general, son ideales para trayectos cortos por nieve y para quienes no desean complicarse con el montaje, ofreciendo una buena relación calidad-precio.

Cadenas de red o cadenas compuestas

Las cadenas de red o compuestas son una opción intermedia entre las de tela y las metálicas. Estas cadenas consisten en una funda formada por una red de cables plásticos combinados con tacos de acero recubiertos de material textil. Su principal ventaja es que, aunque requieren más tensión y fuerza al montarlas debido al ajuste más firme, ofrecen una mayor durabilidad que las de tela.

Pese a todo, siguen siendo fáciles de montar y ofrecen una conducción suave, al igual que las cadenas de tela. Son compatibles con sistemas de control de estabilidad, lo que las hace seguras y efectivas en diversas condiciones. Su precio varía entre los 70 y 95 euros, lo que las convierte en una opción algo más cara que las cadenas textiles, pero su mayor resistencia las hace ideales para quienes van a conducir frecuentemente por zonas con nieve. Es la opción que quizá mejor combina durabilidad, facilidad de montaje y prestaciones.

Cadenas semiautomáticas

Las cadenas semiautomáticas, conocidas como ‘spikes spider’, están compuestas por una parte fija que se instala de forma permanente en la llanta y una parte móvil que se monta y desmonta según las condiciones del asfalto. Estas cadenas destacan por su rápida instalación y por ofrecer una gran eficacia en condiciones de nieve o hielo intenso.

Su durabilidad es alta, por lo que son una excelente opción para quienes frecuentan zonas de alta montaña o viajan regularmente por carreteras con nieve. Sin embargo, su principal desventaja es su elevado precio, que oscila entre 200 y 600 euros, mucho más alto que las cadenas convencionales. Son especialmente recomendadas para vehículos de alta gama y neumáticos de perfil bajo que se muevan en condiciones invernales de manera frecuente y durante una parte importante del año.

En qué ruedas se colocan las cadenas del coche

Conocidos todos los tipos de cadenas que existen, es fundamental saber en qué neumáticos debemos colocar las cadenas de nieve para garantizar una conducción segura. Las cadenas deben instalarse siempre en las ruedas motrices del vehículo. Eso significa que, en los coches de tracción delantera, las cadenas deben ir en las ruedas del eje delantero. En los vehículos de tracción trasera, las cadenas deben instalarse en el eje trasero.

Por su parte, para los vehículos 4×4 o de tracción integral, lo ideal es colocar las cadenas en los cuatro neumáticos, ya que esto asegura una tracción equilibrada. Si solo se dispone de un par de cadenas, lo más recomendable es instalarlas en el eje delantero. Además, se recomienda que sea cuál sea el tipo de vehículo que tenemos sólo hagamos el uso de las cadenas cuando hay nieve y hielo y llevar un par de guantes para facilitar el montaje en condiciones de frío.

Cómo saber qué cadenas debe montar mi coche

Para elegir las cadenas de nieve adecuadas para tu coche, es esencial conocer las medidas de los neumáticos, las cuales están indicadas en el lateral del mismo. Debes fijarte en tres elementos clave: el diámetro de la rueda, la anchura del neumático y el perfil del mismo. Estos datos están disponibles en la nomenclatura de la rueda. En un neumático 205/55R/16 91V el primer número indica la anchura, el segundo el perfil y el tercero el diámetro en pulgadas.

También es importante tener en cuenta que las ruedas delanteras y traseras pueden tener dimensiones diferentes en algunos vehículos, por lo que debes verificar ambas. Las cadenas de nieve suelen ser universales para llantas de entre 13 y 17 pulgadas, pero si tu neumático es mayor, necesitarás cadenas específicas que se adapten a sus características. A partir de estas premisas, se debe apostar por las cadenas que mejor se adapten a los requerimientos que tenemos entre los distintos tipos que existen.

Cómo poner las cadenas de nieve en las ruedas

Para instalar cadenas en un coche, primero asegúrate de estar en un lugar seguro, plano y alejado del tráfico, con el freno de mano puesto. Usa guantes para proteger tus manos del frío y consulta el manual del vehículo para saber en qué ruedas deben colocarse las cadenas. Extiende las cadenas en el suelo para verificar que no estén enredadas, y colócalas detrás de la rueda con las conexiones hacia el interior.

Pasa las cadenas por la rueda, une los extremos traseros y luego ajusta los ganchos o cierres delanteros, asegurándote de que las cadenas estén centradas. Si las cadenas incluyen tensores, ajústalos para un mejor ajuste. Conduce unos metros lentamente y revisa que estén firmes. Retira las cadenas cuando no sean necesarias y evita superar la velocidad recomendada, que suele ser de 30 a 50 km/h según tipo de cadena, para evitar daños en tus neumáticos y conducir con la mayor seguridad posible sobre nieve o hielo.

El artículo Cómo saber qué cadenas de nieve necesita tu coche fue publicado originalmente en Urban Tecno.