Existe muchos experimentos realizados en el espacio a lo largo de las últimas décadas. Sin ir más lejos, la Estación Espacial Internacional es el laboratorio más extraordinario jamás creado y el hogar de infinidad de investigaciones que serán de gran utilidad para continuar aumentando el conocimiento humano. Ahora, tenemos que viajar hasta la estación china para conocer un experimento de lo más curioso. Y no, no involucra a seres humanos, sino a unos animales muy particulares.
El inesperado habitante de la estación espacial Tiangong
A mediados del pasado mes de noviembre, la nave Tianzhou-8 despegaba rumbo a la estación china para llevar nuevo cargamento a los astronautas que allí se encuentran destinados. Sin embargo, no vamos a hablarte de los 480 kilogramos de equipos para realizar investigaciones en la órbita terrestre, sino de unos pasajeros que no podrías imaginar.
Por primera vez, la estación espacial Tiangong acogerá a moscas de la fruta en el interior de sus compartimentos. Tal y como se asegura en la información facilitada por el medio chino CGTN, los experimentos realizados con estos insectos pretenden ayudar a la humanidad. Li Yan, investigador de la Academia China de las Ciencias, ha declarado:
A través del blindaje magnético en el experimento, podemos reducir el campo magnético en cierto ambiente de cultivo. Y, después, observaremos si las moscas de la fruta pueden sobrevivir en el ambiente espacial tanto con microgravedad como con campos hipomagnéticos y si muestran comportamientos específicos o nuevos.
Estas moscas de la fruta, no solo son históricas por ser las primeras en ascender a la estación espacial china, sino que podrían ser fundamentales a la hora de entender cómo el espacio cambia diferentes tipos de organismos. En su caso, además, se estudiarán sus movimientos en órbita y sus cambios a nivel de ritmos biológicos.
Igual, al menos así nos ha pasado a nosotros, te estás preguntando por qué elegir moscas de la fruta para experimentar con ellas en la estación espacial china. Estos insectos no son ajenos a la experimentación moderna y han sido seleccionados en infinidad de ocasiones, sobre todo en el apartado de investigaciones genéticas. Y es que el ser humano ha conseguido mapear su genoma por completo y no estamos tan alejados de estos pequeños animales como podrías pensar.
Evidentemente, su diminuto tamaño también es un factor decisivo a la hora de enviarlos como cargamento en misiones espaciales. Además, su corta esperanza de vida, de alrededor de dos semanas, y su alta capacidad de reproducción, los hacen ideales para experimentar con ellos y descubrir cómo evolucionan con el paso de las generaciones.
Zhang Wei, investigador de Academia China de las Ciencias, también ha hablado acerca de las futuras investigaciones que serán realizadas en la estación Tiangong. El científico afirma:
También estamos planeando enviar ratones a la estación espacial en el futuro para realizar estudios en profundidad en sus sistemas nerviosos, huesos, músculos, inmunidad o otras áreas clave.
El artículo Los nuevos habitantes de esta estación espacial china han sido enviados a estudiar el universo y no son humanos fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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