Un niño crea una criptomoneda, gana 50.000 dólares y se cansa de ella. Fue lo peor que pudo hacer

Las criptomonedas ya llevan un tiempo con nosotros. Aunque existen varias en el mercado, la más popular es el Bitcoin. Al momento de escribir estas líneas, un solo Bitcoin equivale a más de 93 mil dólares. Si hace unos años tuviste la oportunidad de hacerte con unos cuantos de ellos a buen precio, enhorabuena: eres rico. Si no, y estás interesado en el mundillo, toca buscar otras alternativas.

Más allá de Ethereum, Tether o Solana o, que son algunas de las criptomonedas más populares, también existen las memecoins, que son criptomonedas que surgen como broma o por diversión, inspiradas en memes de Internet o tendencias virales del momento. No son, como otras criptomonedas, parte de una innovación, como puede ser el caso de las mencionadas Bitcoin o Ethereum.

Uno de los mayores ejemplos lo encontramos en Dogecoin (DOGE), que comenzó en 2013 como broma, basada en el meme del perro Shiba Inu, pero que acabó generando una gran comunidad y obtuvo el apoyo de figuras importantes como Elon Musk. Un adolescente, también como diversión, creó su propio memecoin: ganó mucho dinero, pero no esperaba que tuviera consecuencias negativas.

Un niño de 10 años crea la criptomoneda Gen Z Quant. Esta son sus consecuencias

Podría decirse que el hijo de Adam Biesk, un asesor artístico, es un prodigio de las finanzas. A su corta edad de aproximadamente 10 años, creó la memecoin Gen Z Quant. Sus padres eran conscientes de que el chico jugaba y experimentaba con ellas, pero en ningún momento se les pasó por la cabeza que podría haber generado tanto dinero en apenas unas horas.

El pequeño insistía en que había ganado una pequeña fortuna con Gen Z Quant, pero sus padres no le creyeron hasta que el teléfono de la madre empezó a sonar: multitud de mensajes directos furiosos a través de Instagram. Es entonces cuando se dieron cuenta de que su hijo les había dicho la verdad, aunque la historia va más allá.

La tarde del 19 de diciembre, a eso de las 19:48 horas, el hijo de Adam Biesk había liberado mil millones de su criptomoneda. Al mismo tiempo, había gastado alrededor de 350 dólares para comprar 51 millones de tokens, lo que equivale a un 5% del suministro total. Más tarde, inició una retransmisión en vivo en Pump.Fun, un sitio web usado para el lanzamiento de la memecoin. La gente empezó a interesarse por ella, lo que hizo que su precio aumentase bruscamente.

Unos minutos más tardes, el joven Biesk había ganado y canejado casi 30.000 dólares. Esto hizo que el valor de Gen Z Quant se desplomase. Tras obtener el dinero, hizo lo mismo con dos criptomonedas más: I’m sorry (Lo siento) y my dog lucy (Mi perro Lucy). Esos 30.000 dólares se convirtieron finalmente en más de 50.000 dólares bien entrada la noche.

Sin embargo, la táctica del hijo de Adam Biesk es bien conocida en el mundo de las criptomonedas, sobre todo de «monedas de broma»: soft rug pull (tirar de la alfombra suavemente). Funciona de la siguiente manera: alguien crea una nueva moneda, la promociona en línea y acaba vendiendo todas sus tenencias. Esta maniobra está en una zona legal gris, pero es muy condenada en la criptosfera por ser muy poco ético.

Las reacciones no tardaron en aparecer: oleadas de críticas en el chat de Pump.Fun por parte del resto de usuarios al haber sido engañados por un «pequeño maldito estafador». Además, empezaron a circular fotografías de Adam Biesk, su mujer e hijo por la red social X, además de otros miembros de la familia.

Nuestro teléfono empezó a explotar. Simplementa llamada telefónicas tras llamada. Era una situación muy aterradora

Como venganza, los afectados comenzaron a comprar más Gen Z Quant, lo que acabó elevando su valor. Alrededor de las 03:00 horas del día siguiente, la criptomoneda tenía un valor total teórico de 72 millones de dólares; mucho más del valor inicial de más de 3 millones de dólares.

A pesar de que hay que tener 18 años para apostar o invertir en bolsa, cuando se habla de criptomonedas las leyes son más difusas. Y esto se ha vuelto más peligroso desde que existe Pump.Fun, ya que permite a las personas lanzar nuevas memecoins al instante, sin coste alguno. Desde su lanzamiento, han aparecido millones de memecoins, y es la aplicación criptográfica que más rápido está creciendo hasta la fecha: 250 millones de dólares en ingresos en menos de un año de funcionamiento, según la fuente.

El artículo Un niño crea una criptomoneda, gana 50.000 dólares y se cansa de ella. Fue lo peor que pudo hacer fue publicado originalmente en Urban Tecno.