Existen muchas marcas de coches, pero pocas tan conocidas como Toyota. Esta compañía nipona, que fue fundada en el año 1937, se ha convertido en una de las principales empresas automotrices del mundo. Se dedica a fabricar vehículos de alta calidad, confiables y eficientes. Es famosa por su sistema de producción TPS, también conocido como Lean Manufacturing, que se centra en la eliminación de desperdicios y mejoramiento continuo.
Toyota fue una de las empresas automotrices pioneras en la producción de vehículos híbridos, destacando el Toyota Prius, que vio la luz en 1997. Actualmente, la compañía sigue siendo líder en el mercado de este tipo de coches, pero no quiere dormirse en los laureles: en los últimos años ha invertido cuantiosas sumas de dinero para el desarrollo de vehículos eléctricos y autónomos.
La compañía nipona quiere continuar siendo referente en el futuro, y por eso está buscando maneras de expandir su línea de negocios. En un curioso giro de los acontecimientos, Toyota no solo quiere centrarse en los coches, sino que también va a apostar por la fabricación de cohetes espaciales.
Más de 40 millones de dólares para fabricar cohetes espaciales en serie
El presidente de Toyota, Akio Toyoda, aprovechó el marco del CES 2025 de Las Vegas, uno de los eventos más importantes en la industria de productos electrónicos de consumo, para anunciar que la conocida empresa automotriz iba a expandir su línea de negocio, con el objetivo puesto en la fabricación de cohetes espaciales. Lo hizo mencionando el concepto «invención por kakezan» o «invención por multiplicación», refiriéndose al potencial que surge de las colaboraciones.
Cuando se trata de lo que es posible cuando se trabaja juntos, el cielo es el límite. El futuro de la movilidad no debería limitarse solo a la Tierra o a una sola emprea automovilística
Toyota se ha aliado con Insterstellar Technologies, una empresa privada japonesa de viajes espaciales, para cumplir su nuevo sueño. La inversión de 7 mil millones de yenes (aproximadamente, 44,3 millones de dólares) se ha realizado a Interstellar Technologies a través de su filial, Woven by Toyota.
Interstellar Technologies, fundada en 2013 por Takafumi Horie, está enfocada en el desarrollo de cohetes suborbitales y orbitales, y su objetivo es realizar lanzamientos espaciales comerciales accesibles para clientes de todo el mundo. La compañía busca reducir los costes lo máximo posible, a la vez que mantener la innovación tecnológica.
Algunos de los cohetes desarrollados por Interstellar Technologies son MOMO (cohete para lanzamientos suborbitales, visto como una forma económica de poner cargas útiles pequeñas en el espacio) o Zero (vehículo suborbital más avanzado que se destina a vuelos espaciales de mayor capacidad y alcance).
La industria aeroespacial no resulta nueva para Toyota. La compañía ha estado trabajando con la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) desde 2019 en el desarrollo de un vehículo lunar para el programa Artemis de la NASA. Este programa es una iniciativa espacial a largo plazo cuyo objetivo es regresar a la Luna y establecer una presencia humana sostenible allí, con miras a futuras misiones hacia Marte.
El cambio de rumbo de Toyota es una declaración de intenciones, como explica Hajime Kumabe, director ejecutivo de Woven by Toyota: «esta es otra forma de ampliar la movilidad en tierra, mar y aire. Nuestra experiencia artesanal será una ctivo para la fabricación de cohetes de Interstellar», recoge la fuente. Toyota no solo quiere centrarse en el transporte por tierra, sino que busca hacerse un hueco en el transporte espacial.
El artículo Toyota deja a un lado los coches, ahora quiere llegar al espacio. La empresa japonesa invierte millones en la fabricación de cohetes fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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