Sucedió hace cuatro años: el expresidente Joe Biden llegaba a la Casa Blanca y firmaba diversas órdenes ejecutivas para hacer frente a los desafíos del cambio climático. En esta ocasión, parece que Estados Unidos vuelve a la casilla de salida en una lucha que parecía liderar. Te explicamos qué ha sucedido en las últimas horas y cuál es la postura actual del país americano respecto al calentamiento global y las alteraciones de los patrones climatológicos.
Trump contra el cambio climático
Estamos convencidos de que has visto ya, en más de un medio de comunicación, al siempre desafiante Donald Trump sentado en el Despacho Oval de la Casa Blanca. Allí, con periodistas a su alrededor, y también algunos de sus ayudantes, el nuevo presidente de Estados Unidos ha empezado a abrir carpetas y a firmar documentos, en realidad hablamos de órdenes ejecutivas, como si no hubiese un mañana.
La mayoría de esas órdenes buscan revertir políticas implantadas durante la administración Biden, precisamente una época en la que se sustituyeron polémicas medidas creadas por Donald Trump en su primera etapa en la Casa Blanca. Ahora, parece que el escenario, nuevamente, ha vuelto a cambiar. Tal y como podemos leer en el titular del comunicado emitido por la Casa Blanca, el presidente Trump pone «a América primero en los acuerdos medioambientales internacionales«.
Lo primero que habría que aclarar es que estas órdenes ejecutivas no sirven para cambiar ningún tipo de legislación. Simplemente, Donald Trump está poniendo piedras en el camino de algunas leyes y mandatos, lo que acabará por llenar los tribunales de disputas legales en su nombre. La orden ejecutiva busca retirar a Estados Unidos del Acuerdo de París, en el que no están naciones como Irán, Yemen, Eritrea, Sudán del Sur o Libia.
Evidentemente, ese proceso de retirada no es inmediato. Lo primero que tendrá que hacer la administración Trump es notificar a las Naciones Unidas que tiene la intención de retirarse de dichos acuerdos. A partir de entonces, el proceso podría demorarse hasta un año. Entre los acuerdos de los que no quiere formar parte el actual gobierno de Estados Unidos, se encuentra la ayuda a naciones en desarrollo o el recorte de emisiones de gases de efecto invernadero en un 66% para el año 2035.
El comunicado publicado en la página web de la Casa Blanca, como no podía ser de otra manera, es una elegía a las bondades de Estados Unidos y un aviso, para futuros acuerdos, de que a partir de ahora su ejecutivo se centrará casi exclusivamente en lo que suceda dentro de sus fronteras. De hecho, creen ser el espejo al que el resto de países deben mirarse. Una parte del texto afirma:
La exitosa trayectoria de Estados Unidos en el avance de los objetivos económicosy medioambientales deberían ser un modelo para otros países.
Lejos de contribuir al desarrollo de un planeta más sostenible, Estados Unidos deja claro lo que piensa de este tipo de acuerdos, que «dirigen los dólares de los contribuyentes americanos a países que no necesitan, o no hacen méritos, la asistencia financiera en el interés de la gente americana». Y esto es solo el principio del mandato de Donald Trump.
El artículo El presidente Donald Trump retira a Estados Unidos (otra vez) del acuerdo climático firmado en París fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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