Por qué se calienta el coche: todas las causas posibles y cómo resolverlo

Los humanos solemos tener una temperatura corporal de 36 °C. Y, los motores de combustión interna, por norma general, deben tener el refrigerante a unos 90 °C. Este símil entre la temperatura de funcionamiento y la fiebre no la hemos hecho por casualidad. Si el termostato de tu vehículo marca una temperatura por encima, es que algo no anda bien ahí dentro.

En una máquina tan compleja como un automóvil, pueden estar fallando infinidad de cosas. La causa del sobrecalentamiento puede ser algo tan simple como un manguito rajado en el circuito del refrigerante, hasta una avería seria, como una junta de culata en mal estado.

En este artículo, vamos a contarte punto por punto las causas más posibles por las que se está recalentando el motor de tu coche. Como siempre, vamos a comenzar por lo más común y probable.

Causas más probables por las que se recalienta un coche

Si ves que la aguja de tu coche supera la marca habitual en el relojito de la temperatura, lo más probable es que se trate de una de estas causas:

Mal estado del refrigerante (o nivel insuficiente)

comprobar anticongelante

¿Nivel bajo? Rellena con líquido de la misma especificación

La causa más común suele ser que el sistema de refrigeración no tiene líquido suficiente. El circuito está diseñado para que haya suficiente fluido para darle tiempo a que se enfríe antes de volver a pasar por las rendijas del motor. Si hay poco líquido, el sistema no va a poder hacer bien su trabajo.

Un tanto de lo mismo va a ocurrir si el líquido que tenemos está viejo o contaminado. El fluido ya no tendrá el mismo rendimiento, y comenzarán los problemas.

En muchos casos, basta con rellenar. Siempre respetando la especificación del producto que marca nuestro fabricante y llevando el nivel al máximo estando el sistema frío.

Si el líquido está sucio o contaminado, la solución es un poco más compleja. Hay que vaciar el circuito y llenarlo con líquido nuevo. Además, conviene utilizar antes de hacer el vaciado un aditivo específico para limpiar sistemas de refrigeración. Los hay muy buenos (no son baratos), y son capaces de hacer auténticas maravillas.

Problemas con la bomba de agua

bomba agua

La bomba de agua del coche tiene una vida útil limitada

La bomba de agua se suele cambiar al hacer la distribución. Un error muy común es que la gente ignore este mantenimiento en motores que usan cadena. Como la cadena no se suele sustituir, creemos que la bomba de agua y la correa auxiliar son infinitas. Y no, no lo son.

La bomba del agua permite que todo el fluido circule por el sistema. Con el tiempo, pierde efectividad. De hecho, puede darse el caso de que tenga fugas o sellos gastados por los que puede entrar aire o salir el propio líquido.

En algunas ocasiones, no será completamente la bomba, sino alguno de sus accesorios. En cualquier caso, si te da problemas, cámbialo todo. Lo caro de esta operación es la mano de obra, no los componentes.

Termostato defectuoso

El termostato es el que decide cuándo el refrigerante se va a mover y cuándo no. El sistema de refrigeración de un coche es bastante más complejo que lo que vemos a simple vista. Cuando el motor está frío, el sistema se cierra para calentar el líquido lo antes posible. Una vez alcanzamos esa temperatura, el termostato abre paso hacia el radiador para disipar el calor. Además, hay sistemas más sobredimensionados que se pueden abrir o cerrar para mejorar todavía más la disipación.

Bueno, que nos disipamos nosotros también de la idea principal. Si el termostato no está en buen estado, se puede quedar cerrado. La temperatura del líquido subirá rápido, pero no acabará saliendo para el radiador. Al no enfriarse, estaremos “refrigerando” el motor con agua caliente. En cuestión de poco tiempo, el motor excederá la temperatura óptima de funcionamiento.

Que el termostato se quede abierto tampoco es buena noticia. En climas muy fríos, puede ocurrir que no llegue a alcanzarse la temperatura idónea, causando desgaste del motor, consumo excesivo y otros inconvenientes a evitar.

Problemas con el radiador

problemas coche radiador

Si el líquido no puede fluir bien por el radiador, la temperatura no tardará en subir

En el radiador, el líquido del sistema va a pasar por unos conductos muy finos y se va a enfriar con el paso del aire. Si el sistema tiene óxido, sedimentos o cualquier tipo de suciedad, puede producirse una obstrucción interna. Lo mismo ocurre si, en la parte exterior del radiador, hay elementos como hojas o suciedad que impiden que pase el aire.

Si el radiador tiene fugas, el sistema, al no estar estanco, no va a funcionar bien. El agua puede llegar a hervir, lo cual es un problema importante.

La solución hay que aplicarla en función de dónde esté el problema. Si la obstrucción es interna, el aditivo del que hemos hablado anteriormente te va a servir, pero tendrás que sustituir luego el líquido por uno nuevo. Si el problema es externo, con retirar lo que impide el flujo del aire, bastará.

Sin embargo, en la mayoría de los casos, el problema estará causado por piezas dañadas. Habrá que cambiar el radiador, mangueras, abrazaderas y cualquier cosa estropeada por un repuesto nuevo y en buen estado.

Ventilador

El propio movimiento del automóvil ya va a crear la corriente suficiente para enfriar el líquido que pasa por el radiador. No obstante, el ventilador está ahí para compensar si el aire no es suficiente, o si paramos el coche.

Si el ventilador no está bien, puede que no gire al ritmo necesario para poder enfriar. Los fallos eléctricos también pueden hacer que el propio ventilador no llegue a girar más. Un tanto de lo mismo puede ocurrir si el bobinado interno se quema.

La solución pasa por sustituir la pieza defectuosa. No suele ser especialmente caro ni llevar muchas horas de mano de obra.

Fugas y desperfectos en el sistema de refrigeración

escape fluido refrigerante

Truco: si no ves un charco de refrigerante debajo del coche, usa una linterna para ojear el vano motor. El refrigerante suele ser fluorescente

Cualquier desperfecto que haya en el sistema de refrigeración puede causar también un recalentamiento del motor. Hablamos de mangueras rajadas o algo tan básico como un sello que está en mal estado.

El problema es que no siempre es fácil de diagnosticar. Si el líquido se fuga, puedes echar un ojo con una linterna y descubrir de dónde sale el fluido. Si no te atreves a hacer la reparación tú mismo, por lo menos tendrás la información suficiente como para hacerle el trabajo más fácil a tu mecánico —así no podrá decir que no le ha encontrado el fallo—.

Sensores en mal estado

Los coches modernos están repletos de sensores. A mayor cantidad de sensores, mayor cantidad de sensores que se pueden romper. Probabilidad básica. Pues bien, puede que tu coche no tenga un problema tan grave como piensas. Simplemente, puede que un sensor esté defectuoso y esté dando una información errónea a la centralita del vehículo.

Ahora bien, no te descuides. Si el motor trabaja con información errónea, pueden aparecer también otras averías. Así que, si descubres una avería de este tipo con un lector de códigos, no ignores tampoco el problema.

Problemas de culata y junta de culata

presupuesto reparar junta culata

Nunca te vendrá bien quemar una junta de culata. Es bastante cara de reparar

Como ya te explicamos en nuestro artículo sobre qué es la junta de culata en un coche y cómo funciona, este elemento está entre el bloque del coche y la propia culata. En caso de que se produzca un desperfecto, es posible que aceite y refrigerante se mezclen, lo que se considera una avería grave.

No solo eso. Las averías de esta categoría van aparejadas a pérdida de potencia y ralentí inestable. La avería suele ser relativamente sencilla de diagnosticar porque saldrá humo blanco del escape, un síntoma inequívoco de que se está quemando refrigerante.

Aquí no hay nada que puedas hacer por tu parte. Un mecánico tendrá que medir la compresión del motor y analizar la magnitud de la avería. Si se ha quemado la junta, hay que sustituirla. En casos muy extremos, puede que incluso el bloque tenga fisuras, lo que dificulta enormemente las probabilidades de que encontremos solución al problema.

Problemas con el intercooler

que es intercooler

Si entra aire muy caliente a la admisión, el motor se puede dañar gravemente

En vehículos turboalimentados, solemos tener un sistema de refrigeración adicional para el aire que sale comprimido a alta temperatura del turbo.

Meter aire caliente en los cilindros no es buena idea, pues puede hacer que la mezcla de aire y combustible explote antes de tiempo. Eso puede causar averías más complejas.

Si el problema está en este punto, te invitamos a que leas mejor esta entrada completa en la que explicamos qué es el intercooler del coche y qué pasa si se rompe.

Obstrucción en el escape

Esto último es poco probable, pero puede llegar a ocurrir en determinados casos. Si los gases de la combustión no pueden salir por el escape, el calor se va a acabar acumulando en el motor. Esto puede ocurrir, por ejemplo, si tenemos un catalizador taponado.

No obstante, esto sí suele ser más sencillo de diagnosticar. Si es nuestro caso, la pérdida de potencia al acelerar va a ser bastante notoria. También se va a escuchar un soplido en el escape. Y no tardará en salir en el salpicadero la temida advertencia de “Check Engine”, avisándonos de que deberíamos llevar el vehículo al taller cuanto antes.

¿Qué hacer si el coche se calienta de forma repentina?

llamar grua coche

Si quieres evitar males mayores, llama a una grúa

Podríamos cerrar ya el artículo, pero hay unas cuantas cosas que debes saber si ves que la temperatura de tu coche se dispara repentinamente:

  • Estaciona en un lugar seguro: si se te enciende el testigo del motor y ves que la temperatura está demasiado alta, busca una forma segura de detenerte, con tus luces de emergencia y tomando todas las precauciones necesarias.
  • No apagues inmediatamente el motor: en la medida de lo posible, déjalo a ralentí un par de minutos. Si el ventilador funciona, podrá enfriar el líquido, evitando así que la temperatura alcance picos muy bruscos al quitar el contacto.
  • No abras el tapón del agua: bajo ningún concepto lo hagas. Al romper la estanqueidad, saldrá disparada hacia arriba como un géiser y te puedes hacer una quemadura grave.
  • Lo que sí puedes hacer es abrir el capó y echar un ojo, especialmente si has dejado el motor a ralentí. ¿Está girando el ventilador? ¿Hay fugas?
  • Una vez la temperatura se reduzca, revisa el nivel de refrigerante y toma una decisión en función de lo que veas y de lo que acabas de leer en los puntos anteriores.

El mantenimiento es clave para evitar sobrecalentamientos

mantenimiento coche servicio aceite

Mantener el coche como es debido te puede salvar de quedarte tirado en medio de la carretera

No te vamos a decir que una avería de este tipo no pueda aparecer repentinamente. Sin embargo, hacer buenos mantenimientos suele ser la receta perfecta para evitar problemas serios.

El nivel del refrigerante se debe mirar una vez al mes. Si vas a hacer viajes largos, no te olvides de echarle un ojo al líquido antes de arrancar. También es importante cambiar el refrigerante según lo que establezca el fabricante. Y, si ves que hay cambios de color o cosas raras en el líquido, toma medidas. El producto debe estar en perfectas condiciones para poder circular de forma segura.

Por otro lado, el aceite, aunque no lo hemos mencionado hasta ahora, también es muy importante. Si no vamos bien de nivel, o si no lo hemos cambiado desde hace tiempo, también puede ser el desencadenante de averías muy variadas.

Por último, no hay que olvidar nunca el tema del cambio de la bomba de agua cuando toque. Revisar el estado de la correa del alternador también es importante. Al fin y al cabo, si la correa se rompe, la bomba no va a funcionar y, por tanto, el motor no se va a poder refrigerar.

El artículo Por qué se calienta el coche: todas las causas posibles y cómo resolverlo fue publicado originalmente en Urban Tecno.

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