Ya es una realidad: el lugar más virgen de la Antártida se llena de basura. Es un grave problema para el planeta

Es inevitable tener que acabar tirando desechos a la basura en nuestro día a día. Sin embargo, su correcta gestión, sobre todo por parte de gobiernos y compañías, debería ser una máxima en pleno siglo XXI. La realidad, por desgracia, vuelve a darnos un tortazo en la cara, mostrándonos cómo uno de los parajes que se suponían más vírgenes de todo el planeta también empieza a moldearse por la infame obra del ser humano.

La basura hallada en la Antártida

Un grupo de investigadores españoles, liderados por Jesús Ruiz Fernández, responsable del departamento de geografía de la Universidad de Oviedo, han sido testigos del impacto del ser humano en el ecosistema de una remota región de la Antártida. Conocida como la península Byers, esta área ha sido designada como Zona Antártica Especialmente Protegida, pero a pesar de ello, la imagen con la que se han topado los científicos ha sido desoladora.

Tal y como puedes ver en el reportaje emitido en RTVE, miles de objetos ha sido arrastrados hasta su costa por las corrientes marinas. El equipo, en realidad, se encontraba allí para «analizar cómo la retirada de los glaciares en la región hace miles de años, ha influido en la colonización de plantas y seres vivos, así como en la formación de ríos y arroyos, configurando el paisaje actual», según la información publicada en la página web de la Universidad de Oviedo.

Por el momento, el proyecto se ha puesto en pausa debido al encontronazo con la basura acumulada. En estos momentos, los glaciares pasan a un segundo plano, mientras que la investigación se centrará en analizar el impacto ambiental de los objetos con los que se han topado. Estos, por cierto, serán enviados a España para su posterior análisis.

De esta manera, los expertos intentarán comprender la magnitud de la tragedia ecológica y qué implicaciones tiene para este ecosistema antártico. Jesús Ruiz Fernández, en la entrevista concedida a RTVE, aseguraba:

Hemos constatado la llegada masiva de basuras, en principio por las corrientes marinas, seguramente tiradas por barcos en alta mar. Hemos visto que prácticamente llega de todo. Al final esto no deja de ser un termómetro de lo que pasa en el resto del planeta. Quizás en un sitio donde la huella humana es menor es donde mejor se percibe con más claridad qué es lo que está pasando.

Entre los objetos que han sido hallados en la costa de la península Byers, los científicos y las cámaras de RTVE han sido testigos de botellas de vidrio y plástico, chanclas, bidones o botas de plástico. Y es que nuestra actividad local, por mucho que nos cueste visualizarlo, tiene efectos en todos los rincones del planeta.

El artículo Ya es una realidad: el lugar más virgen de la Antártida se llena de basura. Es un grave problema para el planeta fue publicado originalmente en Urban Tecno.

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