La robótica ha evolucionado mucho desde Elektro, el primer robot humanoide de la historia que, entre sus funciones, podía fumar como una persona. Fue creado por la empresa Westinghouse Electric Corporation y presentado en la Feria Mundial de Nueva York de 1939. Fue tal su éxito que regresó al año siguiente acompañado de Sparko, que podía mover la cabeza, caminar hacia delante y hacia atrás, además de mover su cola y ladrar.
Algunas de las últimas y más avanzadas creaciones muestran al robot humanoide más rápido del mundo gracias a unas zapatillas deportivas, o los Optimus de Tesla, que causaron sensación durante la presentación del Cybercab de la compañía, aunque en realidad eran «humanos disfrazados», sin olvidar al mayordomo robótico que cocina, arregla cosas y acepta también tus patadas.
Existen pocas propuestas enfocadas en la creatividad y el arte, ya que son campos «invadidos» por la inteligencia artificial. Sin embargo, si unimos IA con robótica, «nace» Ai-Da, un robot humanoide que está siendo todo un éxito por el valor que alcanzan sus obras en el mercado: hasta un millón de dólares.
Así es el primer robot humanoide que ha conseguido vender su obra en una subasta
Ai-Da es la primera robot artista del mundo que crea obras ultrarrealistas. Como se puede leer en su sitio web dedicado, es capaz de dibujar y pintar usando las cámaras que tiene como ojos gracias a algoritmos basados en inteligencia artificial y su brazo robótico. Creada en febrero de 2019, debutó en la exposición ‘Unsecured Futures’ (Futuros no garantizados, en español), que tuvo lugar en la Universidad de Oxford.
Caracterizada como una joven de cabello corto oscuro, Ai-Da se ha convertido en la primera robot humanoide en vender su obra en una subasta (no obstante, no es la primera obra generada con inteligencia artificial en lograrlo). Y es que hace unos días, Ai-Da vendió un retrato de Alan Turing en Sotheby’s (una casa de subastas fundada en Reino Unido que está especializada en obras de arte y objetos coleccionables) por 1,08 millones de dólares.
Alan Turing fue un matemático, informático teórico y criptógrafo británico que actualmente es considerado el precursor de la informática moderna. Entre sus logros se encuentra el descifrado de los códigos nazis, más concretamente los de la máquina Enigma, lo que supuso un gran avance en el desarrollo de la Segunda Guerra Mundial.
La obra, mostrada por primera vez el pasado mes de mayo durante la conferencia AI for Good Global de las Naciones Unidas en Ginebra, tenía un valor estimado de venta que oscilaba entre los 120.000 y los 180.000 dólares. Se realizaron 27 pujas, pero finalmente fue adquirida por un comprador anónimo.
Aidan Meller, director de Ai-Da Robot Studios y creador del robot humanoide, ha confirmado al medio Mashable que la elección de Alan Turing para la obra fue de la propia Ai-Da tras una pequeña charla:
Conversamos con Ai-Da, utilizando su modelo de lenguaje de IA, sobre lo que le gustaría pintar. En este caso, tuvimos una conversación con ella sobre «IA para el bien», lo que la llevó a mencionar a Alan Turing como una persona clave en la historia de la inteligencia artificial que ella quería pintar
Más tarde, el equipo trató con Ai-Da cómo sería el estilo de la obra: desde la textura hasta el tono, pasado por los colores. El equipo mostró una fotografía a Ai-Da de Turing para que la estudiara, y el algoritmo empezó a trabajar para tomar decisiones. Y como cualquier inteligencia artificial, el conocimiento de Ai-Da se basa en las obras de artistas como Pablo Picasso o Doris Salcedo.
Para la obra final, llamada AI God (Dios de la inteligencia artificial), Ai-Da completó una serie de bocetos en tinta de Alan Turing usando su brazo robótico antes de pintar 15 versiones distintas en formato A3, usando hasta 10 colores tanto en pintura al óleo como acrílica. El proceso de creación de cada obra tomó de seis a ocho horas.
El resultado final que se vendió en la subasta fue impreso en un lienzo gigante. No obstante, Ai-Da tiene sus limitaciones: como mucho puede pintar en lienzos en formato A3. De modo que necesitó unos cuantos ayudantes para completar la obra. Ai-Da añade marcas y texturas en el lienzo final para completar el trabajo, y la ubicación de los elementos, así como el color de las marcas, lo decide la propia Ai-Da.
Actualmente existen varios sistemas de inteligencia artificial especializados en la generación de imágenes. Los más populares son MidJourney y Stable Diffusion, sin olvidar a DALL-E, desarrollado por OpenAI, el mismo laboratorio encargado de ChatGPT. El «problema» es que las obras generadas por IA no se pueden registrar ni tienen autoría. Es lo que le ha pasado a este artista, que se queja de estar perdiendo millones de dólares.
El artículo Es la artista del momento: sus obras se venden por 1 millón de dólares. Pero no es humana fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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