Estos organismos son encontrados en los cementerios y, paradójicamente, sabemos que podrían ser inmortales

En Urban Tecno no tenemos el placer de hablar habitualmente de los campos santos, cosa de la que nos alegramos. No obstante, a veces es imposible no hacerlo. En últimas noticias descubrimos que en China el cementerio tradicional está desapareciendo y siendo sustituido por uno digital. Ahora bien, también hay otros tipos de cementerios como los nucleares. Irónicamente, estas áreas relacionadas con la muerte son el hogar de unos habitantes inmortales. Así lo ha demostrado un científico.

El 6 de junio de 2018, la científica Anne Pringle gritó al mundo que los cementerios estaban llenos de vida. La afirmación extrañó un poco al común de los internautas, pero tal y como ha demostrado la investigadora, en las lápidas de los que ya no están con nosotros hay microorganismos creciendo. En concreto nos referimos a los líquenes, esos pequeños seres parecidos a plantas que normalmente nosotros conocemos con el simple nombre de “musgo”, aunque no es musgo como bien explica Pringle.

Puede que estos microorganismos pasen desapercibidos, pero son inmortales

Estos líquenes crecen en los siete continentes, no se les resiste ningún páramo. Pueden conquistar la fría piedra, el tronco de un árbol o una pequeña isla en el pacífico sur donde los vientos helados hacen imposible cualquier tipo de vida vegetal. Aunque no hace mucho supimos que en la Antártida están empezando a crecer plantas, lo que no es una buena noticia. Sin embargo, volviendo a lo dicho por Anne Pringle, esta investigadora pudo estudiar de cerca el desarrollo y crecimiento de los líquenes en el cementerio de Forest Hill en Madison.

Publicada su investigación en la revista académica Royal Society Publishing, Pringle ha estado examinando los líquenes de citado cementerio durante años con el propósito de comprender mejor su ciclo vital. Aunque a simple vista pueden parecer pequeñas manchas herbáceas de tono blanco, verde y amarillo, en realidad los líquenes son organismos complejos y muy interesantes. Tal y como afirmaba la autora y científica, “no siguen necesariamente las reglas claras y simples que nos enseñan en las clases introductorias de biología”.

Rocas de una pared recubiertas de líquenes de distintas especies y tonalidades

¿Qué significa esto? Pues la traducción literal es que el término “vida” y “muerte” no se les puede aplicar como podríamos hacerlo a un ser humano. Los líquenes, en opinión de Pringle, parecen ser inmortales. Sí, sabemos que es una explicación quizá extrema, pero a la vista de los resultados así parece ser. La científica ha estado comparando tamaños y crecimientos de una colonia de líquenes. Pero eso no le llevó a hablar de inmortalidad, o, mejor dicho, del “no envejecimiento” de estos microorganismos. Quien proveyó de esta información a Pringle fue un experimento que hizo.

Es común ver plantas que crecen donde hay humedad, pero que después de un tiempo, cuando el clima cambia, estas desaparecen si donde previamente había agua deja de haberla. Los líquenes funcionan de manera parecida, la diferencia es que a pesar de secarse parece que sobreviven en una especie de pseudo letargo. Pringle lo puso a prueba echando agua a un liquen en principio seco. Al verter líquido sobre el mismo se observaron cambios en el mismo.

Así es como esta investigadora estadounidense descubrió que los líquenes son microorganismos muy interesantes a pesar de que pasen desapercibidos delante de nuestros ojos. Ahora ya sabemos que tenía razón cuando decía que en los cementerios hay mucha vida, ¡y tanto!

El artículo Estos organismos son encontrados en los cementerios y, paradójicamente, sabemos que podrían ser inmortales fue publicado originalmente en Urban Tecno.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*