España es uno de los países más envejecidos de la Unión Europea. No lo decimos nosotros, sino los datos proporcionados por el Eurostat. En el pasado año 2022, la edad media de la población española alcanzó los 45,1 años, convirtiéndose en el sexto país más envejecido de la UE y en el segundo donde más ha aumentado la edad media durante la última década. Sólo por detrás de Portugal.
Esto significa que cada vez nacen menos niños. De hecho, en 2023 nacieron en España 322.098 bebés, 7.153 menos que en el 2022. Una tendencia que viene de años anteriores y que no garantiza una pirámide de población estable. A pesar de que el Instituto Nacional de Estadística prevé más de cinco millones de habitantes en España en los próximos 15 años, la población nacida en nuestro país pasaría del 81,9% al 61% dentro de 50 años.
Si el número de ancianos es notablemente superior al de niños/jóvenes porque hay pocos nacimientos, la situación es insostenible. Si no se tienen hijos, las personas, cuando sean mayores, pueden tener dificultades para encontrar a alguien que pueda cuidarlos, aunque sea en ciertas tareas. Pero los hombres no tienen esta preocupación gracias a los robots.
El estudio recoge datos de 28 países europeos
Un nuevo estudio conjunto entre las universidades de Oxford y Melbourne revela que los hombres apoyan mucho más la idea de ser cuidados y atendidos por robots en sus casas cuando sean ancianos o estén enfermos que las mujeres. Dicho estudio ha sido publicado en la revista Community, Work and Gamily.
En este estudio se evalúa la actitud que tienen las personas hacia que los robots las cuiden, además de proporcionar compañía cuando se está enfermo o se es mayor. Los datos en los que se basa han sido tomados de 28 países europeos y se tienen en cuenta diversos factores, como el PIB, las tasas de participación de las mujeres en el trabajo y el gasto en cuidado de personas mayores.
La autora principal del estudio es Ekaterina Hertog, profesora asociada del Oxford Internet Institute y del Institute for Ethics in AI de la Universidad de Oxford, que ha realizado las siguientes declaraciones sobre la investigación:
En nuestro estudio investigamos tres preguntas clave: ¿Se sienten las mujeres más cómodas que los hombres siendo atendidas por robots en su vejez? ¿Aquellos con mayores presiones de tiempo y mayores costos de oportunidad apoyan más recibir atención de la tecnología? ¿Y los factores a nivel macro influyen en las actitudes individuales hacia la atención robótica?
Las respuestas y percepciones de los individuos hacia los robots son distintas según cómo de cómodos estén usando la tecnología, además del contexto local y los factores personales de cada uno. Por ejemplo, la capacidad de pago, la falta de tiempo o la asistencia social disponible para personas mayores. Del estudio se rescatan algunas claves:
La gente, por norma general, no está entusiasmada de ser cuidada por robotsLos hombres europeos son más abiertos a la hora de adoptar tecnologías robóticos para su propio cuidado que las mujeres cuando sean mayores o estén enfermos.Los hombres y mujeres más cultos muestran mayor apoyo al uso de robots para sus cuidados.La gente joven y con experiencia en el uso de robots para el trabajo o en ámbitos domésticos es más propensa a usarlos en el futuro para sus cuidados.
Si bien todavía es pronto para que los robots puedan cuidar a los seres humanos y ayudar con las tareas típicas del hogar, lo cierto es que ya existen algunas propuestas muy interesantes. Por ejemplo, el mayordomo robótico que, además de cocinar y arreglar cosas, acepta tus patadas. O el Figure O2, que está pensado para ser fuerza de trabajo humana.
El artículo Los hombres lo tienen claro: prefieren que los robots los cuiden cuando sean mayores, según Oxford fue publicado originalmente en Urban Tecno.
Dejar una contestacion