Samsung lanzó al mercado a finales de 2011 el Galaxy Note, un teléfono móvil inteligente que destacaba por su tamaño. Incluso llegó a denominarse phablet, una mezcla entre las palabras phone (teléfono) y tablet. Su pantalla era HD Super AMOLED de 5,3 pulgadas, lo que resultaba gigantesca para la época, pues uno de sus principales competidores, el iPhone 4s, tenía un panel de solamente 3,5 pulgadas.
Hoy en día, muchos usuarios desearían que existieran smartphones con pantallas de poco más de 5 pulgadas. Pero los fabricantes tienen otros planes: dispositivos con paneles que rozan las siete pulgadas. Un tamaño que resulta complicado de usar con una sola mano, sobre todo si tienes manos relativamente pequeñas.
Si buscamos terminales de gama alta «compactos», algunas de las primeras opciones que encontraríamos en el mercado son el Pixel 9 Pro o el iPhone 16 Pro, dos dispositivos que buscan por quedarse con el mayor trozo del pastel… y que tienen pantallas de más de 6 pulgadas. Y eso sigue siendo demasiado para muchos usuarios que buscan algo más portátil, como lo que ofrecía Apple con sus iPhone mini, pero sin recortar en prestaciones.
Smartphones mini en tamaño, no en características
El Pixel 9 Pro tiene una pantalla de 6,3 pulgadas, y se nota la diferencia respecto a su hermano mayor | Fotografía de Christian Collado
Apple realizó un pequeño gran experimento a finales de 2020: lanzó el iPhone 12 mini. Un dispositivo que buscaba atraer al público enamorado de los teléfonos móviles inteligentes compactos. Si bien consiguió llamar la atención, parece que no acabó encandilando a los consumidores: sus ventas fueron más bajas de lo esperado.
La compañía repitió la táctica un año más tarde con el iPhone 13 mini, y los resultados tampoco mejoraron: fue el teléfono de Apple menos vendido de dicha generación. ¿Qué es lo que falló en este dispositivo que, a priori, parecía tan deseado por una buena parte de los usuarios? Un precio elevado sin tener todas las características de última generación.
Que un smartphone tenga «mini» de apellido no significa que sus características también tengan que serlo. Es una manera de diferenciarlo en tamaño del resto de dispositivos de la línea. Pero no fue el caso del dispositivo de Apple, que apostó por una pantalla a 60 Hz en lugar de 120 Hz (en el caso del 13 mini), así como un sistema de cámaras inferior, a un precio bastante alto comparado con otras propuestas del mercado.
Continuando con Apple, el iPhone 16 podría ser el smartphone «perfecto» (para gustos, colores) de la gama alta, pero vuelve a pecar en los detalles mencionados anteriormente, además de contar con un USB-C bastante lento si lo que se busca es transferir datos por cable. Costando 959 euros, son cosas que no se pueden pasar por alto.
Si bien se está reivindicando el Pixel 9 Pro como uno de los smartphones más interesantes para usuarios que buscan teléfonos compactos,tampoco es una opción «real» porque es grande: 6,3 pulgadas de pantalla. El punto dulce lo encontraríamos en las 5,8-5,9 pulgadas, y las opciones disponibles en el mercado brillan por su ausencia. A excepción del ASUS Zenfone 10.
El Zenfone 10 es uno de los smartphones de la pasada generación de ASUS. Destaca por su tamaño reducido, con unas dimensiones de 146,5 x 68,1 x 9,4 mm y un peso aproximado de 172 gramos. Además de tener una pantalla AMOLED de 5,9 pulgadas a 120 Hz y compatible con alto rango dinámico, disponía de otras características propias de la gama alta:
Procesador Snapdragon 8 Gen 28 o 16 GB de memoria RAM LPDDR5XDe 128 a 512 GB de almacenamiento UFS 4.0Doble cámara trasera de 13 MP y frontal de 32 MPAndroid 13Grabación de vídeo en resolución 8KAltavoces duales estéreo con Dirac HD Sound y audio de alta resoluciónWi-Fi 7, Bluetooth 5.3, GPS de doble banda, NFC, USB-C 2.0 (su punto más flojo)Batería de 4.300 mAh
Se puso a la venta desde 729 euros, un precio más que interesante para un dispositivo de sus características. Actualmente, está rebajado, ya que la compañía no ha lanzado un sucesor de su tamaño, sino un modelo mucho más grande: el ASUS Zenfone 11 Ultra. Pero es la prueba de que es posible crear un teléfono compacto sin escatimar en características.
Es poco probable que veamos más propuestas así. Ya tendría que cambiar mucho el mercado para volver a las pantallas pequeñas. Así que habrá que acostumbrarse a que la nueva definición de compacto sean las 6,3 pulgadas, pues es el punto de partida de muchos fabricantes. Incluso el nuevo vivo X200 Pro mini, que es exclusivo de China, tiene un panel de estas dimensiones.
El artículo Más grande no siempre es mejor: la gente quiere smartphones compactos que no escatimen en funciones fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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