Hay una prueba en la ITV que es como esa asignatura que se te atragantaba en el instituto en la Universidad. La prueba de gases es una máquina de echar para atrás la ITV. Y, a pesar de lo que mucha gente piensa, cuanto más moderno sea tu vehículo, más probable es que te cueste pasar el test.
Los sistemas anticontaminación que llevan los coches modernos son bastante efectivos. Sin embargo, si no le damos “zapatilla” de vez en cuando al coche —subir de revoluciones con una marcha corta, no estamos diciendo de saltar ninguna norma de circulación—, lo que va a ocurrir es que estos sistemas se van a llenar de carbonilla. Y, si la admisión o el escape de tu vehículo se llena de estos depósitos de carbono, es probable que no consigas pasar la Inspección Técnica de Vehículos en España.
En esta entrada vamos a explicarte qué debes hacer si tu automóvil no pasa la prueba. Hasta hace unos años, lo normal es que este problema solo apareciera en vehículos con propulsores diésel. Sin embargo, los coches con motor gasolina se han unido al club de la carbonilla desde que funcionan con turbo, inyección directa y filtros de partículas.
ITV Desfavorable por gases – Diésel
Si conduces siempre en marchas muy largas, tu coche lo puede pasar mal en esta prueba
Los coches que tienen motores diésel son muy propensos a no pasar esta prueba. Como no queremos repetirnos, te enlazamos desde ya esta entrada en la que ya explicamos en qué consiste la prueba de gases de la ITV en España. Pero bueno, por resumir, en nuestro automóvil diésel, lo que le van a medir es la opacidad del sistema de escape. Existen unos límites y, si los valores medidos quedan por encima, se considera que la inspección no es apta.
El problema puede venir por varios sitos, ya que la carbonilla se puede quedar incrustada tanto en la admisión, como en el filtro de partículas en caso de que se disponga de tal. Como cada caso es un mundo, te vamos a dar las claves de lo que hay que hacer. Vamos a empezar por el caso más leve, y terminaremos este epígrafe con la solución más drástica.
Conducción a altas RPM
Los automóviles diésel están diseñados para que los llevemos a muy bajas vueltas. Es normal, y los fabricantes los diseñan así queriendo. De hecho, suelen llevar cajas de cambio que permiten ir a velocidades de carretera de forma cómoda, y con el motor poco revolucionado.
El problema de esto es que hay dos sistemas anticontaminación a los que no les sienta bien que hagamos esa conducción moderada. Son la EGR y el FAP:
- La EGR es el sistema que recircula los gases de escape. Sirve para bajar los óxidos de nitrógeno que salen de la combustión. Sin embargo, la válvula se abre cuando circulamos a regímenes más altos de vueltas. Si circulamos siempre con marchas muy largas y no dejamos que la EGR se abra, la carbonilla se acumulará en la admisión. Y, tarde o temprano, el problema dará la cara.
- En el filtro antipartículas (FAP), pasa un tanto de lo mismo. El sistema atrapa las partículas. Pero si no llevamos de vez en cuando el motor a un ritmo más alegre, nunca se van a quemar esas partículas acumuladas con el calor. Se acabará atascando y te llevarás un chasco en la ITV.
Por tanto, antes de ir a la ITV, deberías hacer un recorrido corto, con el motor ya precalentado (muy importante esto), y a regímenes altos. Puedes hacer un recorrido corto de autovía a unas 3.500 – 4.000 vueltas en la marcha que corresponda, que será cuarta o tercera. Sin miedo, no se va a romper el coche.
Por cierto, esto no deberías hacerlo solo antes de ir a la ITV. Como método preventivo para salvarte de averías, es también una maravilla. Si no has entendido muy bien lo de las marchas, echa un ojo a esta entrada donde hablamos de qué significa conducir con una marcha larga y cuándo te interesa meterla.
Productos Pre ITV
Con un poco de anticipación, puedes asegurarte de que el escape de tu coche esté limpio para la prueba
No se considera hacer trampa, igual que no es ilegal hacerle un ciclo de limpieza a tu cafetera. Los “Pre ITV” no dejan de ser aditivos limpiadores. Luego hablaremos de aditivos más concretos, pero estos suelen ofrecer un todo en uno bastante apañado.
¿Cómo funcionan? Simplemente, se echan en el depósito y luego de repostar. Lo siguiente es tan sencillo como hacer kilómetros para gastar el combustible. El producto se encargará de limpiar inyectores, escape y otros sistemas. En la medida de lo posible, y siguiendo lo que acabamos de explicar arriba, mejor si se hace un poco alto de vueltas.
Adelantar mantenimientos
Hablamos principalmente de cambiar el filtro del aire, para garantizar que el aire que entra al motor no se esté frenando por culpa de la suciedad.
Además, no es mala idea cambiar aceite y filtro e incluso revisar los inyectores, por si estuvieran defectuosos y estuvieran enriqueciendo la mezcla.
Regeneración del filtro de partículas
Si tu diésel lleva filtro de partículas, debes saber que el sistema está diseñado para que el filtro se regenere. El vehículo, a través de sensores, suele hacer regeneraciones forzadas inyectando más combustible para aumentar la temperatura y quemar los residuos.
Pues bien, a veces, eso no es suficiente, pero se puede forzar la regeneración con dispositivos electrónicos. Lo ideal es que te lo hagan en taller, pues hacen falta aparatos específicos. Si eres un manitas y tienes la confianza suficiente como para saber que no vas a meter la pata, puedes buscar un VCDS o similar que te haga el trabajo. Debes tener conocimientos de informática, buscar bien la información en Internet y ser consciente de que lo que estás tocando.
Lo que va a hacer el programa es mantener el escape a unos 650 grados durante unos 25 minutos aproximadamente. No obstante, si el filtro está muy muy saturado, ve directamente al taller. Si la saturación supera el 80%, hay que hacer otros procesos antes de regenerar.
Aditivos para EGR, inyectores y FAP
Pregunta a tu mecánico de confianza antes de usar cualquier producto sin desconocimiento
Si hemos descuidado demasiado, el aditivo Pre ITV no va a obrar milagros. Sin embargo, si tu caso no es extremo, con aditivos buenos, sí que puedes solucionar la papeleta —y si no, ve directamente al siguiente epígrafe—.
Si quieres ir por esta vía, tienes toda la información que necesitas saber en esta entrada en la que hablamos de qué son los aditivos del motor y qué tipos hay en el mercado.
Eso sí, aquí tienes unos cuantos consejos para no acabar palmando dinero en productos completamente inútiles:
- Evita los aditivos baratos: los buenos aditivos no suelen ser especialmente baratos. Busca marcas reconocidas y productos con muy buenas referencias.
- Un producto, una función: a ser posible, si vas a limpiar inyectores, usa un limpia inyectores. Si quieres limpiar filtro de partículas, busca un producto que sea específico para ello. En términos generales, los productos que mucho abarcan, poco aprietan.
Limpieza de la admisión
La carbonilla que se acumula en la admisión a través del sistema de recirculación de gases puede ser complicada de limpiar incluso con productos específicos. Por suerte, hay solución. Ya te hablamos de ello cuando escribimos sobre cómo limpiar la carbonilla del motor paso a paso. Eso sí, lo mejor es, llegados a este punto, dejar el problema en manos de un profesional.
Si llevas el coche al taller, lo normal es que te solucionen el problema de varias formas distintas:
- La admisión se puede limpiar a mano con productos químicos específicos. Las soluciones suelen ser buenas, aunque son bastante trabajosas para los profesionales.
- Si el sistema EGR está atascado, es posible que tengan incluso que reemplazar el sistema.
- En algunos talleres —cada vez más—, se puede hacer una limpieza con hidrógeno, que permite limpiar perfectamente el sistema sin tener que frotar y dando unos resultados sencillamente sobresalientes.
ITV Desfavorable por gases – Gasolina
Los motores de gasolina tienen una prueba un tanto distinta, pero las soluciones, en ocasiones, son muy similares
¿No has conseguido pasar la ITV con un vehículo de gasolina? No pasa nada, porque este apartado va a ser bastante más escueto que el anterior.
Primero de todo, es recomendable hacer una revisión básica del mantenimiento, poniendo especial atención en el filtro del aire del motor, aceite, filtro del aceite y bujías. Esto último es muy importante, de hecho.
Por otro lado, en vehículos con motores de gasolina, las sondas lambda y los inyectores obstruidos también suelen ser los sospechosos habituales cuando las mediciones lambda que se hacen en la ITV —valga la redundancia—, salen desfavorables.
En el caso de los vehículos gasolina con EGR, los problemas que van a aparecer por la acumulación de la carbonilla van a ser idénticos a los que ya hemos comentado en los coches diésel. Si hay filtro de partículas, como ocurre en coches gasolina modernos, igual. Simplemente, tendremos que buscar aditivos compatibles con nuestro motor en ambos casos.
Además de todo esto, es muy conveniente llevar el coche a la ITV después de haberlo calentado correctamente tras un trayecto corto en carretera a un número elevado de revoluciones. Así, los sistemas anticontaminación estarán en las condiciones óptimas de trabajo, especialmente el catalizador.
El artículo ITV desfavorable por gases: qué puedes hacer para pasarla fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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