Cómo saber el kilometraje real de un coche: todo lo que debes mirar

Solemos decir que los kilómetros son como la edad para un vehículo. Es la medida que utilizamos para medir el desgaste del mismo. Un coche con 30.000 kilómetros tiene todavía bastante vida por delante. Otro de 300.000, puede que también. Pero, desde luego, no debería estar en el mismo estado que el primero.

Por desgracia, el kilometraje se puede alterar. Tú y yo seguramente no podamos hacerlo, pues no es fácil y no sabríamos ni por dónde empezar. Pero, ojeando el mercado, es más que evidente que se venden una buena cantidad de vehículos con el kilometraje adulterado. No es legal, y es una práctica que se debería perseguir con más contundencia. Mientras que las autoridades no se pongan más serias, mucho nos tememos que esta tendencia irá incluso en aumento.

Ahora bien, te estarás preguntando qué puedes hacer por tu parte para evitar que te vendan un vehículo manipulado. En este caso, ya te adelantamos que, si no eres un experto en vehículos, no lo vas a tener tan fácil. No obstante, te vamos a explicar todo lo que se puede comprobar. Luego, tú decides si lo miras por tu cuenta, o si prefieres que este procedimiento lo realice un profesional.

Comprobar informes en línea

El documento de antecedentes de la DGT nos dará todo lo que buscamos a cambio de una pequeña tasa

Nos vamos a gastar miles de euros en un coche, ¿verdad? Pues, entonces, a tu cartera no debería dolerle gastarte 15 o 20 euros en un informe que te va a contar la vida de dicho vehículo. Es más, te recomendamos encarecidamente que metas el dinero que te vas a gastar en informes en el presupuesto que tienes para el vehículo. No lo consideres un gasto, sino una inversión.

En España, tienes dos opciones:

El informe detallado de la DGT es la opción segura. Es bastante económico y te va a dar la información registrada en cada pase por la ITV del automóvil. Si hay una inconsistencia en el kilometraje, aparecerá. También podrás saber muchos más datos técnicos y de uso del vehículo en cuestión.
Por otro lado, está el famoso Carfax. Funciona a nivel internacional y posee también multitud de datos sobre cualquier vehículo. En él, puede aparecer reflejado el kilometraje del vehículo en cualquier momento en el que haya pisado un taller, lo que facilita el poder detectar un coche que ha sido adulterado.

Libro de mantenimiento

¿Se ha perdido el libro de mantenimiento? Vaya por Dios

Si vas a ver el coche presencialmente, pide que te enseñen el libro de mantenimiento. El oficial, el que da la marca al entregar el vehículo. En él, se suelen ver reflejados todos los pases por el servicio técnico oficial. No solo sabrás el kilometraje que tenía en cada servicio, sino que también podrás averiguar qué mantenimiento se le ha hecho al coche.

Si no hay libro de mantenimiento, comienza a sospechar. Cuando se manipula el odómetro de un coche, mágicamente —por lo que sea, eh—, desaparece el libro de mantenimiento.

Por otro lado, también tienes que sospechar sobre la autenticidad del libro de mantenimiento. Es más fácil quitarlo del medio que falsificar uno. Eso está claro. Pero, en los últimos años, algunos delincuentes más avispados están comenzando a hacer falsificaciones con tal de aportar una prueba que respalde su versión. Ante la duda, acude a un concesionario oficial de la marca del vehículo y te dirán si el libro es real, o si es una falsificación.

Precaución con los vehículos importados

A través de los informes, puedes saber si el vehículo que quieres comprar viene de otro país. No hay ningún problema en que un vehículo provenga del exterior. Pero debes saber que este tipo de coches son más propensos a tener manipulaciones de kilometraje.

Si un coche viene de Alemania, por ejemplo, el primer kilometraje que va a reflejar el informe de la DGT va a ser el que tenía a la hora de la matriculación en España. El resto será un misterio. Si bien es cierto que puedes sacar esta información con otros informes, debes sospechar.

Precaución con los vehículos “exóticos”

Hay coches que se manipulan más que otros. No es que sean más fáciles de tocar. Es que los delincuentes que se dedican a hacer estas prácticas, saben que ciertos coches tienen más mercado que otros. Por tanto, trucando el kilometraje, se aseguran de dar salida a vehículos que se han devaluado precisamente por haber rodado mucho.

Pero, ¿a qué nos referimos con “vehículos exóticos”? Automóviles de marcas premium, SUVs de lujo y deportivos son mejores candidatos a la manipulación que otros vehículos más simples.

Y reiteramos: no es que un coche como un Mercedes Clase E, un Volkswagen Golf GTI o un BMW M3 sean más fáciles o difíciles de manipular que un Seat Ibiza. Es, simplemente, que a los tres primeros les pueden sacar más dinero restando 100.000 kilómetros del marcador que si se hace eso mismo con el utilitario.

Análisis del desgaste del vehículo

¿Muchas cosas rotas para ser el coche «nuevo»? [Imagen: NeedCarHelp]

Empecemos este bloque con un símil. Un chico que dice tener 20 años, se presenta ante ti. Tiene presbicia, canas, arrugas por toda la cara y se ha roto dos veces ya la cadera. No tiene 20 años, ¿verdad? Pues con los coches pasa exactamente lo mismo. Por mucho que algunos vendedores se encarguen de esconder y manipular la realidad, la mecánica y el desgaste son como la prueba del algodón.

Desgaste del interior

Para un comprador normal que no es un experto en mecánica, el interior es la parte del coche que más pistas puede ofrecer. Puede que no sepas cómo funciona un árbol de levas, pero sí que sabes cómo debería estar el asiento de un vehículo seminuevo.

La zona con mayor desgaste del coche va a ser siempre la zona del conductor, pues es la que se va a usar en todos los casos:

El volante se puede desgastar más o menos en función de la calidad que tenga, de las condiciones climáticas a las que se enfrente el vehículo y al trato. Pero, por poner un ejemplo, con 100.000 kilómetros, un volante puede tener roces, pero no debería estar destrozado.
Los pedales tampoco mienten. Son duros, pero se desgastan al pisarlos. Y es raro que los cambien, pues hay que desmontar medio coche para hacerlo. Si a un vehículo le han metido una “limada” de 100.000 kilómetros, los de ahí abajo no te van a mentir.
Botoneras: tanto en el volante como en la consola central. No vamos a criticar la calidad de los plásticos de muchos fabricantes —que son malos con ganas, pero no queremos señalar—. Sin embargo, no suelen ser tan blandos como para presentar grietas o marcas gruesas con poco kilometraje.
Las partes textiles también son importantes. Puntos saltados, superficies rasgadas, manchas, deformaciones… es habitual que ocurra en coches con muchos kilómetros, pero no en vehículos que tienen poco uso.

Discos de freno

Los discos de freno tienen una vida útil promedio de 80.000 a 100.000 kilómetros, dependiendo del estilo de conducción —si el que pilota va como un loco, pueden durar la mitad—. Sin embargo, conocer este rango nos permite tener ya una pista: si un coche con 60.000 kilómetros ya se vende con discos nuevos, o con unos que están en las últimas, es probable que el kilometraje haya sido alterado.

En cualquier caso, este punto tiene una excepción. Si el desgaste del disco es irregular, puede que el coche tenga problemas con el sistema de frenado o que se haya usado de forma brusca o intensiva.

Neumáticos

Los neumáticos no te van a servir para saber si te la están pegando con un coche de 150.000 kilómetros. Pero sí que te van a decir mucho si el coche tiene una cifra baja, como 20.000.

En el lateral del neumático tienes la fecha de fabricación del neumático, marcada con la semana y año. Un coche con muy pocos kilómetros, pero que usa un juego completo de neumáticos nuevos, es posible que esconda algo.

Y podemos ir un poco más allá. Supongamos que el coche tiene 25.000 kilómetros y los neumáticos tienen un desgaste similar a esa rodada. Comprueba ahora fecha de fabricación del coche y de los neumáticos. ¿Hay mucho tiempo de diferencia? Pues sigue buscando pistas, porque ya empieza a oler mal. Por cierto, puedes aprender a leer los números de las ruedas con esta guía sobre el significado de los números de los neumáticos.

Silenblocks

Los silenblocks son unos componentes de goma y metal que absorben impactos y vibraciones. Forman parte de la suspensión y su duración ronda entre los 150.000 y los 200.000 kilómetros en la mayoría de los casos.

Si inspeccionas un vehículo con menos de ese kilometraje y encuentras unos silentblocks agrietados o deformados, sospecha: el desgaste prematuro sugiere un recorrido mayor o condiciones de conducción extremas, como caminos sin asfaltar. O hay manipulación del kilometraje, o el vehículo ha sufrido mucha conducción en terrenos difíciles. Busca otra unidad.

Contratar un servicio de peritaje profesional

Hemos hablado antes de invertir en informes. Sin embargo, si te vas a gastar bastante dinero en un coche usado, o si tu trabajo depende del vehículo que vas a comprar, lo más sensato que puedes hacer es contratar a un tercero para que revise el coche por ti.

En muchos casos, entre particulares, con vehículos normales y corrientes, no es necesario llegar a estos puntos. Valdrá con analizar el estado del coche, revisar la mecánica y, como mucho, llevar el vehículo a un taller a elección del comprador para que le hagan un chequeo.

Sin embargo, si vamos a adquirir el coche en un compraventa profesional, la revisión por parte de un profesional independiente es clave. Por desgracia, la gran mayoría de los vehículos manipulados los venden profesionales. ¿Los manipulan ellos? Es un misterio. ¿Significa eso que debes desconfiar de todo compraventa? En absoluto. Nos consta que la gran parte de ellos hacen bien su trabajo, pero eso no quita que puedas toparte con una estafa de este tipo.

Si quieres ir a lo seguro, nuestra recomendación es que pagues a un profesional para que vaya a probar el coche por ti. Te costará unos 200 euros o más, pero vas a conseguir el aprobado o el suspenso de una persona independiente, con formación, y que tiene acceso a maquinaria profesional con la que puede certificar que el coche ha sido manipulado. Con herramientas de diagnóstico que no están al alcance de los particulares, es posible comprobar las distintas centralitas de los coches para encontrar discrepancias en el kilometraje.

Por ello, aunque sea una inversión extra de dinero, conviene usar este comodín para poder dormir con tranquilidad una vez que compremos el vehículo. Es cierto, se te puede quedar cara de tonto si, después de invertir el dinero, el profesional te dice que la unidad que querías comprar era un timo. Pero no habrás tirado el dinero, sino todo lo contrario. Te habrás librado de un engaño y habrás ganado dinero y tiempo a la larga.

Antes de despedirnos, si no tienes claro cuántos son pocos y cuántos son muchos kilómetros en un vehículo, te recomendamos que mires esta entrada en la que hablamos de cuál es el kilometraje máximo de un coche de combustión.

El artículo Cómo saber el kilometraje real de un coche: todo lo que debes mirar fue publicado originalmente en Urban Tecno.