Desde que Donald Trump regresó al Despacho Oval, parece que los terremotos políticos, económicos y culturales no han hecho más que sacudir los cimientos de la nación norteamericana. El presidente de Estados Unidos quiere dejar claro que su mandato será muy diferente del que llevó a cabo su predecesor, aunque parece que en muchos terrenos se está pasando de frenada. Y algunas misiones de la NASA empiezan a ver como la sombra de Trump y de Musk se alarga hacia ellos.
El pedregoso futuro de la NASA
Hace algunas semanas, te contábamos cómo la NASA estaba preocupada por la influencia que tenía SpaceX en las últimas decisiones en la institución pública. Ahora, un nuevo revés podría azotar a la agencia espacial: tiene forma de recorte y afectaría a los programas de ciencia.
No estamos hablando de reducir una pequeña parte de las partidas que se destinaban a estos programas, sino de recortes propuestos en la Dirección de Misiones Científicas de la NASA, que llegarían hasta el 50%. Fuentes consultadas por el medio Ars Technica aseguran que los recortes no están aún aprobados, además de que el porcentaje podría ser menor, pero que la intención de Donald Trump es que la ciencia en la NASA esté cada vez menos presente.
Nicola Fox es el administrador asociado de la NASA que dirige los programas de ciencia y pudo ser preguntado respecto a estos rumores en una rueda de prensa celebrada en Houston el pasado jueves. Nicola afirmaba:
No hemos tenido ninguna información todavía acerca del presupuesto y odio planear algo basándome en rumores y especulaciones. Ya sabes, continuaremos haciendo una gran ciencia. Continuaremos teniendo una cartera equilibrada de ciencia, seguro. Y, sabes, estaremos agradecidos por lo que tenemos y haremos un gran trabajo con ello.
Sin embargo, otras voces sí parecen mojarse en cuanto a los rumores de recortes presupuestarios en la NASA. Un caso claro es el de Casey Dreier, jefe de políticas espaciales de La Sociedad Planetaria, que afirma que «si esto se implementa, sería nada menos que un evento de extinción para la ciencia espacial y para la exploración en los Estados Unidos».
De hecho, el responsable de la organización no gubernamental asegura que «perder tanto dinero, tan rápido, no tiene precedentes en la historia de la NASA». Recalcando que:
Forzaría decisiones terribles, incluyendo la desconexión de multitud de misiones activas, productivas e irremplazables, interrumpiedo casi todos los desarrollos de nuevas misiones y diezmando la fuerza de trabajo de la ciencia espacial del país.
Para que te hagas una idea, de los 25.000 millones de euros que tenía como presupuesto la NASA en 2024, el dedicado a ciencia era de 7.400 millones de euros. Desglosados, estaríamos hablando de 2.700 millones para ciencia planetaria, 2.200 millones para ciencias de la Tierra, 1.500 millones para astrofísica y 800 millones para heliofísica. Todo reducido a la mitad.
El artículo Donald Trump se fija en la NASA y no para bien: la agencia ya espera recortes extraordinarios. Volver a la Luna quizá ya no sea posible fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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