La inteligencia artificial es una tecnología que propone revolucionar el mundo. La teoría es que haga las vidas de las personas mucho más fáciles, pero también existe el miedo de que se convierta en un gran peligro para la humanidad. Es lo que ha llevado a muchos detractores a criticarla duramente, y a la Unión Europea luchar por un desarrollo seguro y sostenible, prohibiendo los sistemas que supongan un riesgo «inaceptable».
Algunos de los peligros potenciales de la inteligencia artificial es utilizarla para generar noticias falsas y distorsionar la realidad a través de los deepfakes, lo que puede provocar alteraciones en las elecciones, economía y seguridad de países enteros. También se ha vuelto una tecnología bastante útil para los ciberataques, haciendo que la vida digital sea más complicada.
Es posible que muchos de los miedos relacionados con la inteligencia artificial, como que reemplace a millones de personas en sus trabajos, sean exagerados. Pero cuando se escucha a figuras tan importantes de la industria como Sam Altman hablar sobre escenarios en los que la IA puede salirse de control, es para reflexionar.
La inteligencia artificial puede ser muy buena… o no
En mayo de 2023, Sam Altman compareció ante el Subcomité Judicial del Senado sobre Privacidad, Tecnología y Derecho para hablar con los legisladores sobre la mejor manera de regular la tecnología. Altman es cofundador y CEO de OpenAI, una de las tecnologías especializadas en IA más importantes de Estados Unidos y el mundo, conocida principalmente por su bot conversacional ChatGPT.
El medio FOX News Digital, después de testificar, le preguntó sobre ejemplos aterradores de inteligencia artificial. El empresario no tuvo problemas en mencionar algunos casos terribles en los que la IA podría provocar un gran daño:
Una IA que pudiera diseñar nuevos patógenos biológicos. Una IA que pudiera piratear sistemas informáticos. Creo que todos estos son aterradores. Estos sistemas pueden volverse bastante poderosos
Cuando se habla de inteligencia artificial, suele pensarse en bots conversacionales como ChatGPT, Claude, Copilot o hasta Grok, desarrollado por xAI (empresa fundada por Elon Musk). Sin embargo, la tecnología va mucho más allá.
Una de las compañías que más invierte en IA en Microsoft. Los responsables de Windows 11 están desarrollando varios sistemas basados en esta tecnología. Por ejemplo, uno capaz de controlar software y también robots, o el que permite `encontrar nuevos materiales de forma mucho más sencilla y rápida, reduciendo así el tiempo de las investigaciones.
También cuenta con herramientas de IA pensadas para reducir la carga de trabajo del personal sanitario, concretamente de enfermeras y doctores. Las posibilidades son prácticamente ilimitadas, y por eso ya hay creaciones capaces de poner los pelos de punta. Una de las más escalofriantes, sobre todo por sentirse inquietantemente real, es esta IA que parece sacada de la película ‘Her’.
El artículo Sam Altman, CEO de OpenAI, pone en relevancia los peligros de una inteligencia artificial fuera de control: «Una IA que pueda diseñar nuevos patógenos biológicos. Creo que todas estas cosas dan miedo» fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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