Estados Unidos ya tiene el problema dentro de sus fronteras. El avispón de patas amarillas, más conocido como Vespa velutina, ya está diezmando la población de las abejas. Todo parece indicar que la reproducción masiva de esta especie invasora tuvo lugar en el año 2023, habiéndose mostrado intratable desde entonces. Ahora, momento en el que se empiezan a notar los efectos en la economía y en la propia cantidad de colonias de abejas, parece que se actuará en consecuencia. ¿Cómo va a afrontar el país esta nueva plaga? He aquí algunas de las claves a tener en cuenta.
La avispa velutina ya está está haciendo estragos, también, en Estados Unidos
El siglo XXI se ha caracterizado, desde el punto de vista de los ecosistemas, por la entrada masiva de especies invasoras en los ecosistemas. La globalización de las economías mundiales ha provocado que muchas especies se hayan movido por todo el planeta, consiguiendo establecer colonias en los lugares de destino de las mercancías. Una de las especies que más daño está causando en lugares como Europa es la avispa velutina, la cual ataca, principalmente, los territorios poblados por las abejas.
Las abejas son animales muy importantes en los ecosistemas gracias a su contribución a la polinización. Sin ellas, la vegetación no podría abrirse paso en un medio natural, con todo lo que ello podría implicar en términos de la cadena trófica. La aparición del avispón supone una gran amenaza para las colmenas, ya que un solo ejemplar puede ser capaz de matar a decenas de unidades. De hecho, la velutina suele posicionarse a la entrada de las colonias de abejas, evitando que estas últimas salgan a recolectar el polen.
En algunos países, la producción de miel ha caído hasta en un 35% debido a la presencia de esta especie invasora en los ecosistemas. Como podrás imaginar, esto se convierte en pérdidas millonarias para los apicultores, así como una pérdida de la biodiversidad a gran escala. De acuerdo con Ars Technica, la velutina no ha parado de crecer en número de ejemplares desde que aparecieron los primeros nidos el verano pasado. En Estado de Georgia ya ha pedido a la población que informen sobre cualquier descubrimiento de colonias para lograr neutralizarlas.
Existen múltiples técnicas para eliminar los nidos con sus respectivas larvas. Desde el uso del fuego a la propia fuerza bruta, se están usando todos estos medios para limitar el desarrollo de esta especie en los ecosistemas de Estados Unidos. Una de las claves para evitar ataques es aprovechar las horas nocturnas para exterminar los nidos. La baja luminosidad calma la actividad de estos insectos al ser diurnos, por lo que resultar ser el mejor momento para actuar. Sus colonias se suelen situar en las alturas para garantizar su seguridad.
Al mismo tiempo que la hormiga roja de fuego, conviene actuar cuanto antes mejor, ya que su capacidad reproductiva es exponencial con cada generación. Cada colonia puede estar formada por miles de ejemplares, convirtiéndose en una gran amenaza para los parajes naturales de las áreas extranjeras. ¿Es posible parar el desarrollo de esta especie en nuevas áreas geográficas? Se necesitará mucha inversión para poner coto a su crecimiento.
El artículo Estados Unidos se propone defender a sus abejas de este nuevo enemigo de dos alas y letal fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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