Parecía un coche, pero tenía una única rueda. La Dinasfera bien pudo haber sido el coche del futuro

A lo largo de la historia ha habido medios de transporte de todo tipo. La conocida como la Dinasfera es uno de los más extraño de cuantos han circulado por las calles y carreteras, ya que constaba, básicamente, de una única rueda en la que el conductor y posibles acompañantes se encontraban en su interior. En el día de hoy queremos mostrarse cómo era posible su funcionamiento y por qué, sin embargo, su desarrollo no fue fructífero. ¿Qué hubiese pasado si hubiese sido un éxito?

La Dinasfera, un invento del siglo XX que, sin embargo, no tuvo éxito en el mercado

La Dinasfera nunca tuvo un éxito, pero lo cierto es que hubo diversos prototipos en marcha. Su funcionamiento, además, admitía una tecnología puramente eléctrica y otra basada en la gasolina. La primera opción, no obstante, llamaba la atención por poder transportar únicamente a una persona debido al gran volumen que ocupaba la batería. Su diseño era muy simple y, de hecho, carecía de volante. Para poder girar, el conductor tan solo debía inclinarse hacia el costado correspondiente.

Presentado por primera vez en la playa inglesa Brean Sands, el prototipo original era capaz de circular a una velocidad máxima de 50 km/h, todo un hito para la época. Todo ello, además, teniendo en cuenta que el peso del conjunto llegaba, casi, a las media tonelada de peso debido a su chasis metálico repleto de refuerzos. Pese a que han aparecido medios de transporte alternativos como el MG – X o el Microlino, esta propuesta rompe con cualquier otra propuesta pensada para circular por la calle.

Tras la creación de los primeros modelos en 1933, los pocos fabricantes que se atrevieron a crear unidades dejaron de lado su producción. Al fin y al cabo, nos encontramos ante un modelo que no era práctico debido a sus más de tres metros de altura y la nula presencia de medidas de seguridad frente al tráfico de la ciudad. La llegada de la Segunda Guerra Mundial menos de una década después de su presentación acabó por enterrar para siempre un proyecto que podría haber sido revolucionario.

La energía que se generaba durante la aceleración era muy alta, un factor que impedía una fácil frenada. Esto convertía a este medio de transporte en un absoluto peligro, ya que podría atropellar a varias personas si no se tomaban precauciones. La adaptación de las ciudades a este vehículo no era viable, por lo que se decidió aparcar el desarrollo de mejoras para conseguir que esta opción fuera un éxito. Por ello, el vehículo convencional acabó imponiéndose poco después.

El artículo Parecía un coche, pero tenía una única rueda. La Dinasfera bien pudo haber sido el coche del futuro fue publicado originalmente en Urban Tecno.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*