El mundo del coleccionismo de monedas es muy amplio y cuenta tanto con aficionados que buscan rarezas por todo el mundo, como con personas que hacen negocio de este hobbie. Ya deberías conocer las 10 monedas de colección más caras del mundo y qué factores determinan si una moneda antigua tiene algún valor. Ahora, te presentamos una particular moneda, su historia y su valor. Por suerte para los coleccionistas, no es una locura.
El comienzo de una tradición numismática y olímpica
Gracias al libro ‘Coins of the Modern Olympic Games’, redactado por Michele Menard, sabemos que aunque las primeras monedas acuñadas con motivo de esta celebración deportiva se remontan al año 480 a.C., si hablamos de Juegos Olímpicos Modernos podemos coronar al gobierno de Finlandia como el instigador de una tradición que, incluso hoy en día, continúa su legado.
En el libro que te mencionábamos anteriormente, se asegura que la aparición de las monedas conmemorativas era la manera que tenían los antiguos griegos de unir al público con los Juegos Olímpicos, como si estos objetos tuviesen un valor de conexión que se ha ido perdiendo con el paso del tiempo. Era el regalo que la gente de la época se llevaba a sus casas cuando no podía acudir a la cita olímpica.
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Eso sí, regresando a la era moderna, fue en el año 1951 cuando el gobierno de Finlandia propuso la acuñación de la primera moneda conmemorativa de los Juegos Olímpicos, ya en pleno siglo XX, y que es la conocida como 500 Markkaa o los 500 marcos finlandeses. Además, estamos hablando de una moneda que cuenta con una particularidad, que únicamente ha sido replicada en otra ocasión en toda la historia de los Juegos Olímpicos.
Al igual que sucedió con las monedas de 25 centavos acuñadas en 2007 para celebrar los Juegos Olímpicos de Vancouver en 2010, esta moneda de 500 marcos finlandeses se acuñó en grandes cantidades y fue puesta en circulación en el país, como moneda de uso legal, pudiendo ser utilizada, además de como recuerdo de una cita olímpica, como método de pago en cualquier comercio de la nación nórdica.
Y este, como podrás imaginar, es uno de los motivos por los que la moneda finlandesa no tiene un valor tan alto en el mercado de los coleccionistas como otras monedas que la han seguido en citas posteriores. Si hacemos caso a los portales online especializados, estamos hablando de que esta moneda de 500 Markkaa puede por 18 euros o en el portal CoinsCB por tan sólo 20 euros. A veces, el coleccionismo no es cuestión de dinero, sino de amor por una afición.
El artículo Fue la primera moneda olímpica de la historia y no es tan cara como uno podría pensar fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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