Fue una de las grandes videoconsolas de su época y, además, puso el estándar de los 60 fps como algo habitual a la hora de encender el dispositivo y disponerse a disfrutar de algunos de los mejores títulos que hemos podido jugar con la tecnología de Sony. Sin embargo, ahora esta consola ha sido prácticamente olvidada, es verdad que se pueden jugar a títulos de PS2 en Android, frente a pujantes tecnologías, que aún así no siempre son capaces de alcanzar la marca de los 60 fps. ¿Cómo es posible?
Los frames perdidos desde la PlayStation 2
La segunda videoconsola de sobremesa de Sony Computer Entertainment fue abandonada en favor de una generación que incluía a la PlayStation 3, donde debutó el servicio PlayStation Plus, y a la competencia Xbox 360. Gracias a que los televisores empezaban a demostrar resoluciones a 720p y 1080p, los detalles en los juegos comenzaron a ser cada vez más complejos gráficamente, lo que supuso títulos como nunca antes se habían visto, pero también mayor necesidad de procesamiento para cada frame.
Es por eso que en esa tercera generación, los videojuegos tenían como objetivo alcanzar los 30 fps, aunque en algunos casos ni tan siquiera alcanzaban esta cifra, quedándose en 20 fps, algo que convertía las consolas en experiencias visuales similares a lo que podemos observar al ver una película de cine. Sin embargo, podría parecer que el problema llega por parte de la GPU, algo que no es del todo cierto.
La CPU tenía un papel muy importante, ya que era la que proporcionaba los cálculos necesarios para ejecutar los gráficos de los juegos. Si la CPU no es lo suficientemente potente, la información no llega rápido a la GPU y, por tanto, los 60 fps son inalcanzables. Es verdad que PlayStation 3 tenía una CPU realmente avanzada, pero su arquitectura era complicada para programar juegos y esto hacía que su rendimiento potencial casi nunca fuese alcanzado.
Si saltamos a la generación de la PlayStation 4 y la Xbox One, a pesar del evidente salto en GPU, sus unidades de procesamiento eran bastante limitadas. Esto implicaba que los gráficos podían subir de calidad, pero el estancamiento continuaba en los 30 fps. Y aquí entramos en la era de la PlayStation 5 y las Xbox Series, donde se alcanzan de manera factible los 60 fps, pero donde se pone de manifiesto una realidad del sector: la amplia mayoría de jugadores prefieren títulos con gráficos excelsos, que videojuegos fluidos.
Y con PlayStation 2, dado lo limitado del apartado gráfico de la época, tenemos que destacar el Graphics Synthesizer, que era la pieza fundamental de la videoconsola para renderizar escenas a velocidades de vértigo, permitiendo que los polígonos por segundo se moviesen de una manera mucho más fluida. Y tú, ¿también prefieres calidad de imagen a fluidez?
El artículo Por qué la PlayStation 2 disponía de más juegos a 60 fps que las consolas actuales fue publicado originalmente en Urban Tecno.
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