Los dinosaurios se extinguieron hace 66 millones de años. Estos majestuosos animales siempre nos han impresionado, y no es para menos. Su tamaño, sus capacidades y su forma nos han llamado la atención desde que éramos niños. Pero lejos de fantasías infantiles, los dinosaurios tienen mucho interés en la comunidad científica. Aparte de conocer sus especies más icónicas, y de saber si eran o no peligrosos, los dinosaurios tienen muchos aspectos interesantes. Por ejemplo que cambiaban sus dientes a lo largo de toda una vida.
Siguiendo con lo que decíamos antes, los dinosaurios todavía guardan muchas incógnitas. En las últimas décadas se han descubierto muchos detalles que antes se ignoraban. Una de las líneas de investigación más sorprendente es la relación de estos animales con las aves actuales. También hay otros aspectos tales como la dentición. Sí, los dientes de dinosaurio darían para escribir un libro porque son una genialidad en sí misma.
Poderosos dientes que reemplazaban durante toda la vida
Cuando vamos a un museo de historia natural podemos observar con claridad el tipo de dientes que usaba cada especie de dinosaurio. Tras haberse descubierto casi 1.000 especies de estos seres, cada cual incorporaba una dentición especializada en los alimentos que los sostenían. Así por ejemplo los carnívoros como el tiranosaurio rex tenían grandes colmillos de 20 centímetros de largo para desgarrar la carne. Los herbívoros, entre ellos la familia de los hadrosaurios, estaban preparados para machacar las duras plantas del periodo Cretácico.
Los hadrosaurios tenían una mandíbula preparada para masticar los alimentos. Los carnívoros tragaban grandes trozos, como los cocodrilos modernos.
Hasta aquí todo fácil de entender, pero la cosa se complica y se vuelve sorprendente. En concreto, los hadrosaurios mencionados, más conocidos popularmente con el nombre de «dinosaurios con pico de pato», eran unos herbívoros muy ávidos. Junto con especies como el triceratops, se ha dicho que hacían el papel de las vacas del Cretácico, ya que se comportaban como tal, moviéndose en grandes rebaños devorando todos los vegetales que se encontraban a su paso.
No obstante, la hierba en el Cretácico todavía era algo reciente. De hecho, no existían grandes praderas como las que hay ahora. Te contaremos que fue en esa etapa geológica de Tierra donde aparecieron las primeras flores. Pero eso como dicen es otra historia. El caso es que estos dinosaurios se dedicaban a comer plantas que muchas veces tenían tallos muy duros, lo que hacía que los dientes se desgastaran muy rápido. ¿Cuál era la solución? Pues como se ha desarrollado en un artículo científico publicado en Nature Comunications, estos reptiles podían cambiar sus dientes a lo largo de toda su vida. Como lo estás leyendo.
Está claro que tener dientes de repuesto durante 30 o 40 años es una cualidad magnífica para los herbívoros. Mientras los dientes se iban desgastando otros nuevos estaban surgiendo de las encías. Así los dinosaurios no tenían necesidad de asistir al dentista ni tampoco se quedaban sin dientes. Al contrario, siempre podían usar su mandíbula fuerte para alimentarse de las coníferas que poblaban todo el globo.
El estudio, realizado por un nutrido equipo de paleontólogos, ha demostrado ser muy útil y ha dado un paso más en el conocimiento que tenemos de estos seres tan majestuosos. En Urban Tecno siempre estamos atentos a todas las novedades sobre dinosaurios, así que no te despistes, ya que siempre hay nuevos descubrimientos de lo más interesantes.
El artículo Los dinosaurios herbívoros no necesitaban ir al dentista: los dientes de estos animales crecían sin parar fue publicado originalmente en Urban Tecno.
Dejar una contestacion